Hacienda El Palmar alberga charolais, charbray y los primeros canchim de Colombia

Juan Fernando Núñez Rojas ha dirigido un proyecto de cría de ganado puro charolais y charbray en Puerto López (Meta), con el fin de obtener la mejor producción de carne en trópico alto, lo que también lo llevó adquirir los primeros animales canchim en nuestro país, una de las razas sintéticas creadas en Brasil.

De acuerdo con el ganadero, el proyecto inició con la búsqueda de una raza europea para cruzar con el ganado comercial que tenían en el predio en Puerto López, un municipio ubicado a 365 m s. n. m. con temperatura media de 26,4 ºC y 2900 mm de precipitación anual.

“Decidimos cruzar con casi todas las razas posibles: angus argentino y norteamericano, simmental alemán y americano, senepol, asturiana de los valles, chianina, marchigiana, blonde d’Aquitaine, limousin, y hacer una evaluación con todas las crías que obtuvimos”, aseguró.

De ese modo, con el proyecto inseminaron reses con el material genético de cada una de las razas y examinaron las crías F1 comparando características como facilidad de parto, adaptación, resistencia a las altas temperaturas, peso al nacer, entre otras, hasta llevarlas al destete.

“La raza charolais era la que menos nos gustaba por su color blanco. Usamos 10 pajillas de la raza y de esa nos nacieron 4 animales, un macho y tres hembras, de las cuales una murió. Destetamos una ternera con 260 kg, que fue el animal más pesado de todo el lote”, afirmó.

Núñez reveló que posterior al destete, las tres novillas fueron las más destacadas frente a las demás razas, que si bien se destacaron, no lograron adaptarse a la temperatura, hemoparásitos, y demás condiciones. (Reportaje: 5 razas bovinas sintéticas originadas en Latinoamérica)

El experimento tuvo lugar en 2011, y diez años después, aún conservan una de las vacas iniciales que sale a descarte en este tiempo. Con estos resultados, eligieron la raza como la más adecuada para su empresa y decidieron hacer cruces sucesivos solamente con charolais.

“Yo empecé con un pie de cría puro, unos embriones importados de Estados Unidos, para intentar adaptarlos a nuestro predio. Luego adquirimos más vientres y a producir nuestros propios embriones, a trabajar más con la raza. Llegamos al 5/8, al charbray puro”, anotó.

De acuerdo con Núñez, el ganado charbray ha ofrecido mejores rendimientos que el ganado puro, porque tiene mayor confort y se adaptaron a condiciones adversas como las garrapatas o buscar comida, por lo cual el propietario de El Palmar la calificó como “extraordinaria”.

En su finca tiene más de 30 vacunos charbray, casi una tercera parte del inventario que existe en Colombia, pues según él hay apenas 100 en el país. De estos 30, dos son toros reproductores, otros dos son machos y el resto es pie de cría y vientres para reproducción.

Genética para la venta

El joven empresario precisó que su objetivo es vender genética y están en el proceso de alcanzar el inventario suficiente para establecerse como criadores e iniciar la comercialización. (Lea: ¿En qué se diferencian las razas bovinas continentales a las británicas?)

A lo largo de este proceso de más de 10 años, han procurado identificar los errores fenotípicos de los semovientes y corregirlos en sus crías. Dado que esto no se logra en una sola generación, corrigen “de lo más grave a lo menos grave” con cualquiera de las 3 razas.

“Como criadores, tenemos el compromiso cuando producimos un animal con genética de garantizar al cliente que ese ejemplar tiene un respaldo que le va a mejorar su ganadería. Vamos a brindarle una solución a sus problemas”, manifestó el propietario de la hacienda.

Hasta hoy, todo el ganado comercial ya ha sido cruzado con charolais, y estos cruces se están cruzando con charbray, y próximamente con animales canchim, en búsqueda de mayor rusticidad y mejores índices productivos aprovechando las características de la raza sintética.

Los primeros canchim de Colombia

Núñez también se interesó por los canchim, una raza sintética creada por la Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria (Embrapa), que se obtuvo tras cruzar ejemplares charolais con cebú de razas nelore, indubrasil y guzerá, y que fue reconocida en 1983 como nueva raza.

Resaltó que el ganado canchim fue desarrollado buscando precocidad y mayores ganancias de peso bajo pastoreo. Debido a las ventajas de este tipo de ganado y la heredabilidad de sus rasgos, porque ya tiene genes fijados, decidió importar embriones a Colombia.

“Tenemos los primeros canchim del país, son 7 animales de los cuales son 3 hembras y 4 machos. Estamos muy contentos porque se criaron totalmente a potrero, aunque sacrificamos el potencial desarrollo que podría tener uno de estos animales totalmente estabulado”, dijo.

Según el productor, si hubieran criado a los ejemplares canchim bajo estabulación, habrían alcanzado los 600 kg en un año, mientras que en pastoreo lograron llevarlos a los 400 kg en dos años. (Informe: Conozca el inventario estimado de razas bovinas en Colombia)

Este ensayo se trató de otro piloto en su finca con el cual buscaba demostrar el potencial de la raza brasileña en nuestro país. De hecho, para confirmar este potencial, aseguró que planea realizar un nuevo estudio con nuevas crías canchim, esta vez bajo estabulación, hasta los 600 kg.

“Llevamos los novillos a Expomalocas y una de las hembras con 1 año y 4 meses fue la Gran Campeona de las razas sintéticas. Esto nos dio tranquilidad con nuestra elección, pues la raza genotípicamente es extraordinaria, pero queríamos conocer cómo era su productividad”, dijo.

El propietario de Hacienda El Palmar indicó que los canchim tienen una eficiente conversión alimenticia heredada de su genética nelore, y este es un rasgo que busca imprimir en sus animales. También destacó la rusticidad, demostrada tanto empírica como científicamente,

“La canchim es una de las razas que se está difundiendo con mayor rapidez en Brasil porque en las planicies y pantanales tiene los mejores resultados”, apuntó el empresario del Meta. (Lea: Toronto, un ejemplar que dejó huella en la raza Charolaise en Colombia)

Núñez relató que hace parte del chat de la Asociación Brasileña de Criadores de Ganado Canchim y lo sorprendió una foto de un lote de este tipo de ganado, en un predio ubicado en el Chaco paraguayo que atravesaba por una fuerte ola de calor.

“Atrás del ganado se veía un cultivo de maíz, las mazorcas se habían abierto y tenían unos granos hechos como maíz pira. Los canchim estaban en un corral haciendo su rumia y eso me pareció increíble, porque eso quiere decir rusticidad”, manifestó el ganadero.

También se fijan en el aspecto de resistencia a ectoparásitos y hemoparásitos, pues su propósito es contribuir a la ganadería nacional con bovinos totalmente adaptados. Naturalmente, esto depende de las condiciones de cada predio, pero están convencidos de las ventajas de las tres razas.

“Tenemos dos terneras hermanas completas de lavado de embrión de un toro canchim muy reconocido en Brasil que se llama Lendário Calabilu, toro insignia de esta raza (reconocido como Campeón Nacional Canchim en 2006)”, explicó el productor.

Y agregó: “Queremos hacer el lanzamiento de nuestros animales cuando podamos transmitir al cliente los parámetros productivos, no un animal gordo en un escenario. Sobre ese animal gordo queremos dar números, ganancias de peso aquí en Colombia”.

El siguiente proyecto, según confesó, es terminar con el ganado comercial para criar únicamente ganado charbray y canchim puro, de manera que puedan proveer ejemplares y vientres con un menor precio y así aportar excelente genética a los ganaderos de nuestro país a un costo bajo.