Según el dirigente se requiere política pública para reconversión a sistemas silvopastoriles que generen eficiencia y mejoren la biodiversidad. Sabemos hacerlo y somos referente internacional. Asimismo, se requiere tercerizar la trazabilidad bovina, para que, entre estas soluciones, se logren los requerimientos de los mercados.

¿Cómo aprovechar el servicio de trazabilidad que ofrece Cintel para la cadena láctea y así mejorar la comercialización?

La industria láctea colombiana enfrenta una crisis sin precedentes por la proliferación de prácticas fraudulentas. La semana pasada, el Invima decomisó 65.000 litros de leche adulterada y sancionó a 13 empresas por el uso indebido de lactosuero, evidenciando un problema que amenaza a productores y consumidores.

Desde la COP 16, el gremio ganadero invitó a los pequeños productores a implementar en sus predios los diferentes sistemas silvopastoriles y otras prácticas sostenibles para avanzar con soluciones basadas en la naturaleza.

Este mes es clave para el sector ganadero, pues contará con eventos de gran relevancia. La cita bienal de la cúpula ganadera, el 40º Congreso Nacional de Ganaderos, organizado por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), se erige como el evento más importante, atrayendo la atención de los principales líderes y representantes del gremio.

El vicepresidente de Asuntos Estratégicos y Sostenibilidad de Finagro destacó que desde la entidad cuentan con una iniciativa que busca facilitar la transición de una ganadería tradicional a una más responsable con el medio ambiente, adaptando prácticas sostenibles según los ecosistemas locales.

San Sebastián, una empresa dedicada a la transformación de productos lácteos, se ha ganado un lugar en el mercado por su enfoque en la innovación y la salud. Con esta visión, le están apostando a los derivados artesanales y naturales que no solo rinden homenaje al campo colombiano, sino que también contribuyen al bienestar de sus consumidores.

En la capital del departamento, Yopal, nació el emprendimiento Granativo, con el propósito de revolucionar la forma en que se consumen productos locales como la yuca, el plátano y el arroz. Su fundadora, Ana María Bonilla Wilchez es una ingeniera química de profesión que le apostó a convertir estos ingredientes tradicionales en una propuesta gastronómica innovadora y saludable.

La actividad bufalera complementa de manera importante a la bovina y ayuda en la rentabilidad del negocio ganadero.

“Esta canallada no es cierta. Nada más lejano de mi actitud que deshonrar el mérito y el sacrificio de los soldados de Colombia”.