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La ganadería no se regala a las peores tierras

14 de Octubre 2014

La ganadería intensiva, utilizando pasto de corte, bajo fertilización, riego y demás practicas adecuadas de manejo, ofrece tentadoras perspectivas.

Es un error pensar que la ganadería y el cultivo de pastos y forrajes deben relegarse a las peores tierras.

Los pastos por razón de su prolongado ciclo vegetativo, responden particularmente a la fertilización y al riego y en el trópico, con ayuda del agua, se pueden mantener existencias de forrajes frescos y apetecibles durante todo el año.

Bajo estas circunstancia, los beneficios que producen la industria lechera o la ceba, pueden ser comparables, por su alto rendimiento, con las cosechas más lucrativas, y a veces mayores.

De suerte que el cultivo de los pastos tiene cabida en las mejores tierras, incluso regadío, mecanizables y mas fértiles. (Lea: Pastos amarillos, sinónimo de estrés o envejecimiento)

En el siguiente aporte técnico, se describe el procedimiento que se debe seguir para eliminar los sistemas rudimentarios y tradicionales que hacen que nuestras tierras ganaderas sean “inadecuadamente explotadas” y hacer un uso mas eficiente de las tierras y de los pastos, para aumentar a mas de treinta el numero de animales por hectárea y obtener los máximos rendimientos por unidad de área, tiempo, capital y trabajo en nuestras explotaciones ganaderas.

El Pasto Elefante es un gran productor de forraje y se ha comprobado que un metro cuadrado de Pasto elefante produce mas de seis (6) kilogramos (Kg.) de forraje verde por corte, cada 36 días, en suelos fértiles, clima y humedad apropiada.

Es decir que, bajo fertilización, clima y riego adecuado, el elefante puede producir más de 60 ton de forraje verde por hectárea, a intervalos de 5 a 6 semanas durante todo el año.

Teniendo en cuenta tal producción de forraje, el periodo de recuperación del pasto y el consumo diario de un animal, que puede estimarse en 40 Kg. de forraje verde en promedio, se puede plantear la siguiente situación.

Una hectárea (10000 m2) dividida en 36 cuadrados iguales, produce 36 parcelas de 277 m2 cada una (ver figura Nº 01) (10000/36=277,7).

Cada parcela de 277 m2 debe producir 1660 Kg. De forraje verde, si un metro cuadrado produce 6 Kg.; 277,7 x 6 = 1660 Kg. Si un animal se come 40 Kg. de forraje verde al día, 1660 Kg. de forraje deben sostener a 41 animales (1660/40=41).

Un animal se come el 10 Kg. diarios por cada 100 Kg. de peso. Así, un animal de 300 Kg. se come 30 Kg. de forraje al día; Un animal de 400 Kg. se come 40 Kg. de forraje verde al día; Un animal de 500 Kg. se come 50 Kg. de forraje al día.

De tal suerte que al iniciar la ceba los animales pueden comerse, en promedio, cerca de 30 Kg. diarios por animal; Ya que su peso es aproximadamente 300 Kg. Por tanto, una parcela de 277m2 de Elefante que produce 1660 Kg. de forraje, nos pueden sostener alrededor de 55 animales de ese peso, si no hay perdida (1660/30 =55).

En la mitad de la ceba los animales (400 Kg.) pueden comerse un promedio de 40 Kg. de forraje al día. Por tanto una parcela de 277 m2 puede sostener 41 animales (1660/40 =41). (Lea: En la variedad está el placer: Nuevos pastos para ganado bovino)

Al final de la ceba los animales (500 Kg.) pueden comerse un promedio de 50 Kg. de forraje al día. Por tanto una parcela de 277 m2 puede sostener 33 animales (1660/50 = 33).

Si para fines practico, consideramos que el consumo diario es de 40 Kg., podemos afirmar que una parcela de Elefante de 277 m2 que produce 1660 Kg. de forraje cada 36 días, nos proporciona forraje suficiente para mantener 41 animales.

Si disponemos de 36 parcelas d este tipo, cortadas previamente con un día diferencia, esteremos en condiciones de mantener continuamente 41 animales, ya que cada vez que se coseche una parcela, habrá otra que ha descansado 36 días y estará en condiciones de ser cosechada nuevamente.

Tomado de: www.engormix.com