Durante la más reciente reunión del Sistema Nacional de Innovación Agropecuaria (SNIA), realizada en Montería, voceros hicieron un fuerte llamado a fortalecer la extensión agropecuaria en Colombia, destacando la urgencia de convertirla en un servicio permanente y articulado. A su juicio, la falta de continuidad y cobertura está frenando el desarrollo productivo y social en el sector rural.
Javier Rodríguez, secretario técnico de Fedegán-FNG en Boyacá y representante de los Consejos Municipales de Desarrollo Rural ante el Ministerio de Agricultura, subrayó que sin una política robusta de extensión agropecuaria no es posible hablar de competitividad ni de transformación real del campo colombiano.
“No podemos hablar de competitividad si fallamos en lo básico”, advirtió
La extensión agropecuaria fue el eje central del encuentro del SNIA en Montería. Javier Rodríguez expuso la preocupación de los Consejos Municipales por la baja cobertura de los programas de asistencia técnica en el país.
“Colombia no puede hablar de competitividad si fallamos en lo básico. Lo básico, desde mi punto de vista, es la extensión agropecuaria. La realidad en Colombia es que en los municipios tenemos, por bien que nos vaya, ejercicios de dos o tres meses en extensión agropecuaria. Y no puede seguir siendo así. Tiene que ser un ejercicio, como la Ley 1876 lo decía, de carácter público, permanente, pertinente, y que no se limite a un solo año”, anotó.
El líder gremial cuestionó además el avance de los Planes Departamentales de Extensión Agropecuaria (PDEA) y los Proyectos Integrales de Desarrollo Agropecuario y Rural (Pidar).
“Hay una gran pregunta ahí. ¿Cuáles son los resultados de esos PDAs? ¿Cómo se han venido realizando? ¿Qué ejercicios, qué municipios tenemos? ¿Qué cadenas productivas han sido fortalecidas? (…) Boyacá presentó 25 PIDARes, de esos 25 no se financió ninguno. Entonces, viene la pregunta, ¿por qué? ¿Y si pasa en otros departamentos?”, se preguntó.
Llamado a la articulación
Rodríguez invitó a los gremios y a las instituciones públicas a trabajar unidos: “La Reforma Rural Integral no solamente es la entrega de tierras. Tiene que haber todo un entorno, un ecosistema potenciado por todas las entidades que se articulan (…) Aprovecho para invitar a los gremios a que hagamos un frente común para que podamos dar claridad a estos temas que vienen acongojando a la economía del país”.
El vocero también advirtió sobre la difícil coyuntura de cadenas productivas como la papa, el arroz y la leche: “Somos un gremio que vive en crisis. En este momento tenemos una crisis tremenda con el precio de la papa (…) y un riesgo inminente el próximo año con el tema de la cadena láctea, cuando lleguen las leches en polvo sin aranceles de Estados Unidos y Europa”.
Solo 1 de cada 5 productores
La extensión agropecuaria es un servicio de acompañamiento técnico y transferencia de conocimiento a productores rurales, con el fin de mejorar la productividad, la sostenibilidad ambiental y la calidad de vida de las comunidades.
En Colombia, este sistema es liderado por el SNIA, los PDEA y las entidades territoriales, pero su alcance aún es limitado. De acuerdo con el ADR en su Informe de Gestión 2023, de los más de 2,5 millones de productores del país, solo el 22 % recibe asistencia técnica permanente, cifra respaldada por el DANE, referente a los más de 2 millones de pequeños productores que aún no reciben asistencia técnica permanente.
En esa línea, fortalecer este servicio es crucial para cerrar brechas de productividad, impulsar la innovación, apoyar la adaptación al cambio climático y hacer del sector agropecuario un motor de desarrollo rural integral.