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Pequeños ganaderos de Bolívar encuentran su salvación en este tipo de ensilaje

Melanny Orozco 06 de Mayo 2025
Ensilaje tipo formaleta de AgrosaviaFoto: agrosavia.coEn 2025, las cifras siguen creciendo con 105 nuevos productores capacitados sobre el ensilaje de formaleta en apenas cinco eventos.

Una sencilla técnica de conservación de forraje está cambiando la historia para cientos de pequeños productores que ya no dependen de ayudas externas para sobrevivir a las sequías. Gracias a la adopción del ensilaje tipo formaleta, la productividad se mantiene todo el año, asegurando alimento en épocas críticas.


El ensilaje tipo formaleta se posiciona como la solución efectiva para enfrentar la estacionalidad climática y proteger el sustento ganadero en Bolívar. (Lea en CONtexto ganadero: Ensilaje tipo formaleta: ¿cómo conservar forraje sin gastar de más?)

En el departamento de Bolívar, donde las lluvias son bimodales y los periodos de sequía definen el pulso de la producción agropecuaria, surgió una necesidad apremiante, garantizar la alimentación del ganado durante todo el año.

Según José Daniel Castillo Flórez, secretario técnico de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) en Bolívar, el 70 por ciento de los productores implementan en sus fincas un sistema doble propósito, y el 83 por ciento de ellos son pequeños ganaderos con menos de 100 cabezas de ganado.

La vulnerabilidad era evidente, pues lo que se gana en época de lluvias se perdía en las sequías, afectando directamente la rentabilidad y la sostenibilidad del pequeño productor. Hace varios años, un programa del Ministerio de Agricultura entregaban silo de manera puntual, pero no resolvían el problema de fondo que era la necesidad de autosuficiencia.


Ensilaje de formaleta


Fue bajo esa realidad, en la que la tecnología desarrollada por la Corporación colombiana de investigación agropecuaria (Agrosavia) encontró terreno fértil. El ensilaje tipo formaleta ofrece una solución sencilla y económica que permite al productor conservar forrajes en su propia finca, eliminando la dependencia de programas externos.

Castillo Flórez relató “no dimos cuenta que Agrosavia había diseñado una tecnología fácil de adoptar para el pequeño productor. Ahora, no tiene que esperar a que el gobierno le entregue el silo; él mismo puede producirlo y aplicarlo en su finca”.

Para materializar esta solución, Agrosavia ideó la tecnología de la formaleta metálica para conservar forraje de manera práctica. Esta estructura consta de tres piezas metálicas que se ensamblan formando un módulo portátil de 2 metros de diámetro y 0.8 metros de altura.

Gracias a este diseño, cada formaleta permite almacenar alrededor de 2.5 metros cúbicos de forraje conservado, equivalentes a aproximadamente 1.5 a 2 toneladas de forraje verde.

Esta innovación no es solo eficaz por su capacidad de almacenamiento, sino que también fue pensada para que cualquier pequeño productor pudiera implementarla fácilmente en su finca, sin necesidad de grandes inversiones o conocimientos técnicos avanzados.

Desde 2020, cuando se iniciaron los primeros planes de vinculación ganadera, se fueron atendiendo pocas personas, hasta 2024, cuando se han atendido 602 productores en eventos de transferencia tecnológica liderados por Agrosavia, a cerca de este tema. En 2025, las cifras siguen creciendo con 105 nuevos productores capacitados en apenas cinco eventos.


Brigadas y kits


La estrategia para masificar esta práctica ha sido contundente mediante días de campo en el territorio y el fortalecimiento de las asociaciones de productores.

Desde Tecnigan, en su programa Fortalecimiento de Tecnig@n, se dotó a los proyectos locales de Cartagena, San Juan Nepomuceno y Magangué de equipos que incluye formaletas y pica pastos para realizar demostraciones prácticas a los ganaderos del departamento .

Castillo Flórez explicó que “desde que iniciamos a realizar los días de campo, los mismos productores nos solicitan capacitaciones porque ven los beneficios de aplicar esta tecnología en sus fincas. La ventaja de esta tecnología, es que se reúnen entre varios productores y adquieren la formaleta, donde conservan su alimento para épocas críticas”.

El ensilaje de formaleta no solo es una técnica accesible, sino que también enseña al productor a planificar estratégicamente su producción de forraje, dependiendo del estado vegetativo de las plantas al momento de conservación.

Según el profesional, “la cantidad de ensilaje a conservar va a depender del estado vegetativo que tenga el forraje en el momento en que se hace el ensilaje y el número de animales a suplementar”. (Lea en CONtexto ganadero: Cómo preparar su propio henolaje con formaleta en la finca)


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