Aspectos a tener en cuenta cuando reciba animales 'a precio'

Ganaderos e inversionistas apelan a ese formato de trabajo, el cual tiene unas condiciones especiales para que tanto quienes adquieren los animales como sus propietarios logren las ganancias esperadas.   Una modalidad de trabajo a la que apelan algunos productores es la de arrendar terrenos con buena calidad de pasto para que allí los semovientes logren una mejor producción y alcancen la rentabilidad deseada.   Sin embargo, el propietario de esa tierra juega un papel esencial, ya que en ocasiones se estipula que se debe encargar de cuidar a los ejemplares, brindarles comida y garantizar su bienestar, trabajo por el que recibe un porcentaje de las ganancias. (Lea: Prácticas sencillas para aumentar la rentabilidad ganadera)   Para aplicar este formato de trabajo es necesario que ambas partes tengan claras las responsabilidades, ya que la intención es que tanto el inversionista como el propietario del terreno reciban utilidades del negocio.   Fabio Álvarez, productor ubicado en los Llanos Orientales, aseguró que esa práctica tiene mucha responsabilidad para quien recibe los animales pues en cierta medida el éxito de la producción depende de él, por esa razón es indispensable que quede claro desde el principio la ganancia de las partes. (Lea: Costos de producción que años atrás no afectaban la rentabilidad)   “Generalmente hay un inversionista que pone los animales en la finca a un precio convenido y quien recibe los animales se encarga de todos los gastos alimenticios y cuidados de los ejemplares. En caso de que se presenten muertes, se descuentan de las utilidades para salvar la inversión”, aclaró.   En tanto, Javier Rodríguez, productor pecuario y zootecnista, indicó que la modalidad explicada por Álvarez es conocida como ‘a precio’. En ella se acuerda un valor por la recepción de los animales en el predio. No obstante, los cuidados, medicamentos, suplementos y demás se establecen una vez se hace el contrato.   Lo mismo ocurre cuando se presenta una muerte, es necesario aclarar cómo se debe asumir y si recae sobre quien recibe el ganado o aquel que lo pone en el predio; incluso tiene que quedar claro si la pérdida es responsabilidad de ambos. (Lea: Estructura de costos de producción en ganaderías de leche)   “En ese tipo de escenarios es que se presentan dificultades por no dejar claros los posibles panoramas. Lo mismo ocurre con las ventas y cómo se deben repartir los gastos como son el transporte, pesaje, documentos, entre otros aspectos”, argumentó Rodríguez.   Si en el negocio nacen crías se reparten al destete y las utilidades por lo general se establecen en un porcentaje de 60-40, la mayor parte para el dueño del predio y el restante para el propietario de los animales, aunque algunos prefieren que todo sea por mitades.   “Económicamente la carga es mayor para el cuidador del ganado pues sobre la productividad debe cargar su régimen de gastos. Por eso es importante saber cuánto vale producir un kilo de animal teniendo en cuenta los gastos y así proyectar si conviene o no el negocio”, remató el zootecnista. (Lea: Ganadero, estire con orden los billetes para hacer rentable su finca)   Ambos ganaderos sugirieron firmar un contrato en el que se dejan claras todas esas cláusulas y al final ninguna de las partes se vaya a ver afectada.