El drama de una familia que lo perdió todo por cuenta del abigeato

En la madrugada del pasado martes 6 de septiembre, una familia de pequeños productores denunció el robo de sus 10 animales, que constituían el único sustento para vivir.   Joaquín Alfonso Cárdenas y Carmen Amira Malagón son 2 campesinos de Zipaquirá que toda la vida se han dedicado al negocio de la leche. Gracias a esta actividad pudieron sacar adelante a sus hijas, Edna Rocío y Ángela.   “Nosotras somos administradoras de empresas. Mi hermana trabaja en la Cooperativa de Trabajadores de Peldar, Cootrapeldar, y yo estoy en los laboratorios Colvex S.A.”, contó Ángela. (Lea: En furgones estarían transportando carne robada en Zipaquirá)   En las primeras horas de la mañana del pasado martes, ella reportó la pérdida de las 5 vacas lecheras de sus padres, junto con 4 terneros y un torete de la finca que queda ubicada en la vereda Venta Larga, en la vía que conduce de Zipaquirá a Pacho, Cundinamarca.   Sus padres salieron a ordeñar muy temprano, a las 5 de la mañana, pero se llevaron una terrible sorpresa cuando vieron que sus 10 bovinos habían desaparecido. De inmediato, reportaron el robo a las autoridades y a través del chat ganadero en Whatsapp.   “No sabemos a qué horas fue el robo exactamente, creemos que ocurrió en la noche y que se llevaron los animales en un camión. Es la primera vez que nos pasa esto”, relató Ángela, en medio de la conmoción del primer momento. (Lea: Incremento de casos de abigeato preocupa a ganaderos en Zipaquirá)   Ella sabe muy bien, como el resto de los productores, que el robo de una vaca o de un becerro no representa solamente la pérdida de un animal avaluado en cierta cantidad de dinero, que en este caso representa más de $15 millones por los 10 semovientes.   Cuando un ganadero pierde a un bovino, se van con él meses e incluso años de trabajo y de inversiones en suplementos, concentrados, medicinas, fertilizantes y otros cuidados que pueden haber surgido desde el momento en que nació el ternero o lo adquirió en una compra.   La angustia de Ángela y su familia radica en el hecho de haber perdido la única fuente de ingresos de sus padres y la fuente con la que ella y su hermana pudieron estudiar y convertirse en profesionales. (Lea: Abigeato en Zipaquirá y Nemocón aumentó 10 % en lo corrido de 2015)   CONtexto ganadero ha reportado los casos de abigeato que se presentan en esta zona de Cundinamarca, en municipios como Cogua, Nemocón y Zipaquirá. Aunque no son muy constantes los robos a gran escala, las autoridades se preocupan porque se extravían uno o 2 animales destinados al sacrificio ilegal.   Consultado hace unos meses por este diario, el intendente Álex Cagua, comandante de la estación de Policía de Nemocón, afirmó que el sector más vulnerable en la zona es la vía que conduce de Zipaquirá a Ubaté.   Para prevenir el abigeato, la Policía trabaja en conjunto con una red de ganaderos, que a través de equipos Avantel informan sobre cualquier eventualidad. Esto hace parte de una estrategia de planes preventivos y disuasivos, que les permiten a los uniformados enterarse de los casos tan pronto ocurran.   El intendente Cagua insistió en estar vigilantes, hacer revistas en el día y en la noche para revisar el ganado, reforzar las cercas y las entradas por donde puedan entrar los ladrones y contratar personas que sean confiables.   De igual manera, hizo recomendaciones que podrían ser obvias pero que algunos productores dejan pasar, como marcar el ganado o cerciorarse de que los animales efectivamente hayan sido robados. (Lea: A la crisis de la sequía se suman casos de abigeato en Bolívar)   “Se han presentado casos donde un ganadero dice que se perdieron una o 2 cabezas, y resulta que a los 2 días estaban dentro de la misma finca o en una aledaña”, concluyó Cagua.   Por su parte, Ángela y su familia dedicaron toda la mañana del martes a vigilar las cámaras de seguridad en la carretera, aunque desafortunadamente muchas no enfocan bien la vía y las que lo hacen no graban.   Sin embargo, siguen adelante en su empeño y con la ayuda de la Sijín y los productores de la zona, continúan en la búsqueda de los 10 bovinos. Al momento de publicar esta nota, no se tenían noticias sobre el paradero de los semovientes.   Si usted sabe algo sobre este robo o quiere reportar su caso, no dude en informarnos en [email protected].