Producir biodiésel sería posible con el uso de 2 microalgas, según una investigación adelantada en Estados Unidos y a raíz de la cual desde la Universidad Nacional han empezado a estudiar el tema.

Luego de 4 años de investigaciones con microalgas, se identificaron 2 cepas, las cuales tienen gran potencial para elaborar biocombustibles, según reveló la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica del departamento de Comercio de Estados Unidos en un informe, el cual sostiene que estos microorganismos tienen una alta fijación con el dióxido de carbono, CO2, y se alimentan de energía solar para producir biomasa.

Desde la Universidad Nacional, UN, Luis Miguel Serrano Bermúdez, magíster en Ingeniería Química de la institución, recogió los datos del informe y determinó las condiciones aptas para obtener biodiésel con las microalgas, que también pueden ser utilizadas para disminuir los impactos negativos en el medioambiente.

“Ni el bioetanol (hecho a partir de la fermentación de maíz o caña de azúcar) ni el biodiésel (elaborado a partir de aceites de palma, soya u otros cereales) pueden dar respuesta a la demanda global de combustible con sustentabilidad ambiental y económica”, aseguró Serrano Bermúdez. (Lea: Uso de etanol en la gasolina reduce contaminación)

El ingeniero químico determinó que estos microorganismos, específicamente las especies ‘scenedemus ovalternus’ y ‘chlorella vulgaris’, presentaron una mayor productividad de grasas, que equivalen a 4,1 veces la productividad de la palma africana, la cual actualmente se utiliza para producir biodiésel.

Estas microalgas fueron cultivadas en agua destilada, macro y micronutrientes minerales que simulan la composición de agua dulce, bajo iluminación artificial con lámparas fluorescentes a una temperatura de 24 grados centígrados y aireación de 0,7 volúmenes de aire por volumen de medio por minuto.

El país tiene vigente la normativa correspondiente a la ley 939 de 2004 la cual estimula la obtención y comercialización de combustibles de origen vegetal o animal para uso en motores diésel mediante una serie de incentivos y el Conpes 3510 de 2008, el cual considera los lineamientos políticos para promover la producción sostenible de biocombustibles en Colombia. (Lea: Productores de biocombustibles piden más participación en el mercado)

Se espera que este desarrollo científico de la UN tenga apoyo público y privado en el país. Desde la Federación Nacional de Biocombustibles de Colombia, FedeBiocombustibles, afirman que “es algo positivo, que requiere de mayores estudios en Colombia para aumentar su productividad”.