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Campo colombiano

Foto: revistamyt.com.

agricultura

Seguridad alimentaria, ¿en peligro por la sequía?

por: - 31 de Diciembre 1969

‘El Niño’ ha puesto a pensar a más de uno en un posible escenario: el desabastecimiento de alimentos como cereales, frutas, leche o carne. Aunque algunos aseguran que la comida no faltará, otros se mantienen escépticos porque la temporada seca irá hasta marzo de 2015.

‘El Niño’ ha puesto a pensar a más de uno en un posible escenario: el desabastecimiento de alimentos como cereales, frutas, leche o carne. Aunque algunos aseguran que la comida no faltará, otros se mantienen escépticos porque la temporada seca irá hasta marzo de 2015.

Colombia no se preparó para la sequía”, es la frase que por estos días más repiten productores, dirigentes gremiales y presidentes de empresas privadas. Lo dicen porque a futuro el problema estará en la seguridad alimentaria del país, ya que no se tomaron medidas como el establecimiento de distritos de riego, con el fin de tener un buen manejo del agua.

Para Rafael Mejía López, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, SAC, la situación no provocará que la gente tenga que preocuparse por la cantidad de alimentos disponible.

Mejía aseguró que el suministro está garantizado en los lugares de siempre: plazas de mercado y grandes superficies, entre otras. (Lea: ¿Podría presentarse escasez de leche en el país por El Niño?)

Como siempre va a haber mucha comida, pero lo que va a tocar es que las personas empiecen a cambiar sus hábitos. Entiendo que por ejemplo en la Costa comen ñame y yuca, mientras que en el altiplano papa, pero si cabe la posibilidad de que no haya alguno, entonces hay que cambiar. El Fenómeno de El Niño no va estar de norte a sur y de oriente a occidente, hay que recordar que estamos en el trópico y las cosas pueden cambiar”, indicó el dirigente gremial.

Por su parte, Darío Fajardo, consultor del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, Pnud, dijo en CONtexto ganadero en el país sí existe la posibilidad de un eventual desabastecimiento de alimentos básicos como el arroz u otro tipo de cereales y cultivos de ciclo corto que no podrán ser ni sembrados ni cosechados en el segundo semestre de 2014. (Lea: Precio del pollo y huevo podría subir si no llueve en Colombia)

“Al inicio de la década de los 80 Colombia se autoabastecía y hoy estamos importando más del 50 % de los alimentos, eso es un problema de decisión de la política económica, porque la pérdida que hemos tenido en cuanto a la capacidad de producción y alimentación está relacionado con la guerra y el desplazamiento forzado. Este es un costo alto el que estamos pagando y se debe a la falta de decisión del Estado”, afirmó Fajardo.

El consultor del Pnud en Colombia también indicó que con la actual situación que viven productores de La Guajira, Casanare, Santander, Sucre, entre otros, no es raro que productos como arroz, maíz, o cacao empiecen a presentar un déficit como consecuencia de la sequía que hay en la actualidad.

Más positivo se mostró Alfonso Santana, jefe de Investigaciones Económicas de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, quien considera que la producción de alimentos básicos de la canasta familiar como carne y leche no está en peligro y no hay posibilidades de que escaseen en los mercados, pero que será el precio que se cobra el que afectará al consumidor. (Lea: Pérdidas de lecheros del Caribe superan los $1.000 millones)

Cuando los alimentos empiezan a escasear el efecto inmediato es el aumento de precios. Entonces lo que creemos es que con la sequía en la costa se va a producir una ausencia de ganado, lo que podría repercutir en el aumento de precios hacia el consumidor, pero no se verá afectada la seguridad alimentaria porque en Colombia se producen 4 millones de toneladas de carne (y 6.500 litros de leche) y el impacto no deberá ser más allá de eso”, aseguró Santana.

Haya o no escasez de alimentos, los 3 expertos indicaron que tanto el Gobierno, como empresas privadas y públicas, y los mismos productores deben trabajar de la mano para la construcción de infraestructura como distritos de riego, mejoramiento del estado de las vías, entre otros, con el fin de que eventos naturales no vuelvan a afectar al campo colombiano y al consumidor, como pasa en la actualidad.