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columna

Geopolítica y ganadería

por: Oscar Cubillos Pedraza- 31 de Diciembre 1969

Con la situación actual en la que ingresó Rusia como pistolero del lejano oeste a imponer su ley en Ucrania, terminó generando desequilibrios económicos que evidentemente se transmitirán tarde o temprano por nuestro sistema circulatorio: el comercio internacional.

Con la situación actual en la que ingresó Rusia como pistolero del lejano oeste a imponer su ley en Ucrania, terminó generando desequilibrios económicos que evidentemente se transmitirán tarde o temprano por nuestro sistema circulatorio: el comercio internacional.

En el caso de nuestra ganadería tendremos dificultades para exportar carne y lácteos a Rusia, que en 2021 sumaron US$69 millones representados en 16 mil toneladas de carne, 800 toneladas de mantequilla y 700 de leche en polvo. Por supuesto de esta situación se pueden sacar oportunidades para aprovechar en el mediano plazo.

Hay que recordar entonces, que desde 2012 tenemos en vigencia un TLC con EEUU en donde ya existe pleno comercio, pero la industria cárnica nacional no ha logrado exportar un solo kilo de carne al país del norte por cuenta de tener un “vecino sanitario inconveniente” como lo es Venezuela.

Sin embargo, tampoco se puede desconocer que aquí tampoco se ha hecho la tarea completa, específicamente en lo relacionado con el sistema de trazabilidad e identificación animal. Vale recordar que, en el gobierno anterior, el de Santos, se desmontó lo realizado, mientras que el gobierno actual ha tratado de ponerse al día con la tarea que no hizo JuanMa.

Al respecto, bien vale la pena establecer los planes de acción para que nuestro mayor socio comercial, EEUU, nos de la mano, y a su vez se tenga una causa común en política internacional frente a Rusia: no realizarle compras ni ventas.

Efectivamente este tema, fundamental para nuestro sector, terminó tocándose en la reunión Duque-Biden la semana anterior, con el compromiso de acelerar el proceso de admisibilidad de carne colombiana en el mercado de EEUU. De hecho, se estableció el compromiso que el 9 de mayo la autoridad sanitaria del país del norte, APHIS, hará visita de inspección en las plantas colombianas. Magnífico.

Pero vale la pena aclarar que el proceso de admisibilidad continua y para que iniciemos la exportación de carne debemos completar con juicio los pasos necesarios. Colombianos somos y seguramente ya algún incauto desinformado piensa que el mercado americano está habilitado. Ojo con la tarea.

Lo primero, tener en operación el sistema de trazabilidad. No imaginado, o conceptualizado, o dibujado. No. Implementado sí, tarea que corresponde a nuestra autoridad sanitaria: el ICA, que bien determinará si terceriza. Pero es necesario el acelerador a fondo.

Lo segundo, la costa caribe, que incluye parte del norte de Antioquia en la zonificación realizada por ICA en 2020, sin duda es la llamada a ser la primera zona de aftosa sin vacunación que surta el mercado norteamericano. La política pública desde ya debe estar pensando en las estrategias y acciones que permitan lograrlo, lo que sin duda generará tareas a realizar en los circuitos de movilización de animales, el surtimiento para el mercado interno, los estándares de calidad de exportación desde el eslabón primario, el transporte y bienestar animal, así como las BPG, y otro importante número de variables.

En mayo cumpliremos diez años de vigencia del TLC con EEUU y no hemos exportado un kilo de carne. Si dejamos pasar esta oportunidad que la geopolítica ofrece no será nunca. En la jugada.

@ojcubillosp