CONtexto Ganadero - 13 años
Juan Gonzalo Botero Botero

columna

¡Semejantes regalos de navidad!

por: Juan Gonzalo Botero Botero- 31 de Diciembre 1969


Bastante particulares algunos regalos que viene recibiendo la sociedad colombiana en esta época navideña y que han hecho que tenga un sabor agridulce.

Por ejemplo, del Ejército de Liberación Nacional (ELN) el regalo fue un paro armado en el que lograron paralizar principalmente los desplazamientos de los colombianos por las vías del país. Vimos imágenes de retenes ilegales en la Ruta del Sol, a la altura de Pailitas y Pelaya, en el Cesar, en el Cauca y en Antioquia. Hostigamientos muy fuertes en Suárez, también en el Cauca, y el vil atentado al Batallón de Instrucción en Aguachica (Cesar), que terminó con la vida de siete soldados.

No contento con esto y reeditando tiempos pasados, el mismo ELN ha comunicado un cese unilateral al fuego por la temporada navideña, iniciando el 24 de diciembre hasta el 3 de enero. ¡Tan buenos ellos! Prácticamente ahora les estamos debiendo ante tan generoso gesto.

Pero esos regalos del ELN no han sido suficientes. Ahora el Gobierno nacional, como respuesta al hundimiento de la Ley de Financiamiento, ha decretado la emergencia económica. Se habla de establecer tarifas diferenciales en el impuesto al patrimonio a partir de patrimonios desde 3.600 millones de pesos; igualmente impuestos a las apuestas y juegos de azar, a los licores, los hidrocarburos y al sector financiero. Pretende el Gobierno recaudar 16 billones de pesos para atender presiones fiscales actuales.

De igual forma, el anuncio de aumento del salario mínimo; discusión que se ha llevado entre las tensiones entre los empresarios y las centrales obreras y en la cual muy seguramente el gobierno tenderá a satisfacer la solicitud de las últimas.

En los tres años largos de Gobierno, el seguimiento a la gestión ha sido prácticamente nulo. No hay un control ni de lo comprometido ni de lo ejecutado que le permita al Ejecutivo tomar decisiones responsables, incluso de recortes por falta de ejecución, y que habrían permitido evitar la situación en la que hoy se encuentran las finanzas nacionales. Eso sin mencionar el notorio crecimiento de la nómina estatal y de los contratos de prestación de servicios personales, que ha hecho crecer notablemente el gasto público.

Olvida así el Gobierno nacional que lo único que logrará con semejantes regalos es generar mayor desempleo y desestimular la inversión del sector privado.

¡Qué lástima que la tradicional época de Navidad, caracterizada tradicionalmente por la reunión de la familia colombiana, por el rezo de la novena de aguinaldos, el disfrute de los buñuelos y la natilla, por las luces, el árbol de Navidad, el pesebre y la llegada del Niño Dios, se haya visto desdibujada por semejantes regalos de Navidad!

Nota 1. A las familias de los siete soldados asesinados en Aguachica, nuestra solidaridad y sentido pésame.

Nota 2. A mis lectores, una muy feliz Navidad. Que el nacimiento del Niño Jesús traiga la esperanza de un mejor mañana para ustedes y para Colombia.