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Mauricio Vélez - Martillo

Foto: @velezmauri

Más allá del rol profesional, Vélez habla con emoción de su historia personal. Nació en una familia ganadera, y ese vínculo con la tierra y los animales es lo que realmente lo define.

cronica

Entre genética y tradición: así vive Mauricio Vélez las subastas

por: Angie Barbosa- 31 de Diciembre 1969

Tras retomar su carrera como martillo, el actor y presentador impulsa con fuerza las subastas ganaderas en Colombia. Su pasión por el campo, la genética bovina y el vínculo con las tradiciones lo convierten en una figura clave en el auge de este modelo de comercialización.

Tras retomar su carrera como martillo, el actor y presentador impulsa con fuerza las subastas ganaderas en Colombia. Su pasión por el campo, la genética bovina y el vínculo con las tradiciones lo convierten en una figura clave en el auge de este modelo de comercialización.


Para muchos, Mauricio Vélez es una cara reconocida de la televisión colombiana. Pero detrás del presentador, hay un ganadero de cuna que ha decidido volver a sus raíces con fuerza.

Desde hace dos años, Vélez retomó su carrera como martillo, esa figura esencial en las subastas ganaderas, y se ha convertido en un actor clave en el crecimiento y profesionalización de este tipo de eventos.

“Hacienda Bruselas CX7 es una ganadería fundada en 1965 en los Llanos Orientales”, comentó en entrevista con CONtexto ganadero. (Lea en CONtexto ganadero: Famosos que invierten en ganadería: de Mauricio Vélez al actor de Superman Henry Cavill)

Y añadió: “Vendemos genética Brahman para Colombia, particularmente para los Llanos Orientales. Hoy en día, con la biotecnología y con tantas opciones que hay, hacemos parcerías en embriones, vendemos aspiraciones de nuestras vacas donadoras, tenemos semen disponible de algunos de nuestros toros, vendemos toretes de potrero, y nos dedicamos a eso”.

Esa experiencia y conocimiento del sector ganadero, sumados a su carisma y facilidad para comunicar, lo han posicionado como un martillo con criterio y visión. “Yo había sido martillo hace muchos años, en los años noventa”, recordó.

“Me dediqué a la televisión, y cuando salí del programa Buen Día Colombia, dije: ‘Voy a retomar mi carrera’. Empecé a trabajar, hago dupla con una persona muy conocedora del ganado, y en estos últimos dos años hemos realizado algunos de los remates más relevantes de la raza brahman y gyr de Colombia”. (Lea en CONtexto ganadero: Tecnología, legado y unión gremial: la receta de Mauricio Vélez para el gremio ganadero)


El poder de las subastas


La pandemia, como en muchos sectores, aceleró cambios. Las subastas presenciales cedieron paso a formatos virtuales, y con ello se abrió una nueva oportunidad para modernizar la comercialización ganadera. Vélez fue testigo y protagonista de esa transformación.

Las subastas se volvieron una herramienta fantástica para que las personas puedan adquirir y vender ganado. Tienen mucho potencial y Colombia, sin duda alguna, tiene la mejor genética brahman del mundo, diría yo”, aseguró.

A través de su rol como martillo, ha conectado a pequeños y grandes ganaderos con mercados antes inaccesibles. “La gente tiene la posibilidad de acceder a genética extraordinaria, de las mejores ganaderías, a través de estas subastas”, afirmó.

Además de brahman y gyr, destaca el papel de razas como nelore y guzerat en zonas como Arauca y Casanare. “La gente que trabaja en las sabanas inundables del Arauca, del Casanare, tiene un potencial enorme”, explicó, y anunció próximos eventos clave para el sector.

“Próximamente, 16 de agosto, tienen que estar en Yopal en Genética Top Dos para el Llano”, anunció. “Después, La Magia del Brahman y el Gyr en noviembre en Medellín. Y el 27 de septiembre, uno de los remates más bonitos: el de la Ganadería Montecarlo, en (el coliseo principal de) Asdesilla. Ahí vamos a estar como martillo, vamos a trabajar con Jorge Moreno”.


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Vida hecha en el campo


Más allá del rol profesional, Vélez habla con emoción de su historia personal. Nació en una familia ganadera, y ese vínculo con la tierra y los animales es lo que realmente lo define.

Nací ganadero por el ejercicio de la ganadería de mi padre. Crecí muy feliz, muy contento, en el entorno ganadero”, contó. Esa conexión, según él, tiene un valor incalculable.

Y agregó: “Creo que si uno le pregunta a cualquier persona que haya logrado grandes éxitos laborales o económicos, la mayoría dirá: ‘Quiero tener un pedacito de campo con una vaca, un caballo y mi familia unida’. Eso lo tenemos nosotros, los ganaderos, pero a veces no lo valoramos como deberíamos”.

Hoy, entre el martillo, las vacas, y los remates, Mauricio Vélez vive su mejor versión. Sabe que está en el lugar correcto, haciendo lo que más lo apasiona: “Somos muy afortunados de poder tener un espacio de tierra, una vaca, un perro, un caballo, un gato, y a la familia junta. Y eso vale la pena tener”.