logoHeader
Matarratón Suplementos, El matarratón frente al suplemento comercial, matarratón vs suplementos, leucaena, sistemas silpopastoriles, región Caribe de Colombia, UDCA de Cartagena,Vicente Sotomayor Villarroya MVZ, Manuel Humberto Triviño Santos DMV,  CONtexto ganadero, ganadería Colombia, Noticias ganaderas Colombia

Foto: Carta Fedegán

ganaderia-sostenible

El matarratón frente al suplemento comercial

por: - 31 de Diciembre 1969

Bajar los costos de la producción ganadera en la región Caribe es una prioridad. Para producir a menores costos, la región Caribe colombiana requiere desarrollar y transferir tecnologías silvopastoriles con especies de gramíneas y leguminosas arbóreas, como leucaena (Leucaena leococephala) o matarratón (Gliricidia sepium).

Bajar los costos de la producción ganadera en la región Caribe es una prioridad. Para producir a menores costos, la región Caribe colombiana requiere desarrollar y transferir tecnologías silvopastoriles con especies de gramíneas y leguminosas arbóreas, como leucaena (Leucaena leococephala) o matarratón (Gliricidia sepium).   Así los señala una interesante investigación realizada por Vicente Sotomayor Villarroya, MVZ y dirigida por Manuel Humberto Triviño Santos, DMV, en la UDCA de Cartagena, en 2010 que cobra hoy mucha relevancia (Lea Carta Fedegán 118).   La investigación en la que compara el matarratón y el suplemento comercial en la crianza de terneros de doble propósito, para establecer la eficiencia en ganancia de pesos, costos e ingreso.   Aportes de las gramíneas y de las leguminosas   Señalas los investigadores que estas especies de gramíneas y leguminosas arbóreas (leucaena, matarratón) le aportan a la pastura el nitrógeno fijado de la atmosfera, fertilizándolas y aumentando su crecimiento, y al animal, nitrógeno fermentable, proteína sobrepasante y micronutrientes como carotenos, minerales y fibras de buena calidad, que son importantes para suplir las deficiencias de los pastos lignificados por el verano (secos y con tiempo prolongado a la exposición del sol).   El establecimiento de estos sistemas silvopastoriles, además de contrarrestar dichos efectos y mejorar los niveles de productividad, aprovechan los recursos forrajeros locales que han demostrado ser alternativas excelentes de suplementación para los animales en épocas críticas.   Los indicadores productivos   Las sabanas de Córdoba, Sucre y Bolívar se caracterizan por tener suelos de textura franco-arcillosa de baja a moderada fertilidad y susceptible a la erosión, con periodos de sequía y precipitación (estacionalidad de lluvias), que afectan la producción de forra- je y causan una variabilidad entre los meses de menor a mayor producción cercana al 50%.   El pasto predominante es la colosuana o kikuyina (Bothriochloa pertusa) de bajo rendimiento en materia seca, que varía entre 1 y 6 t/ha en invierno y 0,26 t/ha en épocas de sequía (Cuadrado y otros, 1998).   La región Caribe contiene el 33% del total del inventario ganadero nacional, con predominio del doble propósito del cual se obtiene cerca del 40% de la producción láctea nacional.   El intenso verano que la región presenta todos los años y el manejo extensivo tradicional, determina una capacidad de carga de 1,0 cabezas/ha, una producción láctea de 2,7 litros/día (con un sistema de crianza de terneros consistente en dejar para su alimentación un cuarto sin ordeñar (leche que el ternero extrae en un periodo de seis a ocho horas al día), y ganancia media diaria de peso en terneros de sistema doble propósito de 300 gramos, dando pesos al destete relativamente bajos, 130 kilos pro- medio, seguido de una pérdida de condición corporal posdestete.   Adicionalmente, la mortalidad en terneros alcanza niveles del 10% al 12%, lo cual impacta, en forma importante, la rentabilidad de las explotaciones ganaderas, y da como resultado un alto costo de producción que le resta competitividad al sector.   Las variaciones climáticas –que por lo demás han incrementado los periodos de sequía en la región–, afectan de manera considerable la producción de leche y carne y aumentan la mortalidad y los intervalos entre partos.   Evaluación del matarratón como suplemento   La evaluación del matarratón como suplemento en terneros lactantes de uno a cuatro meses como alternativa nutricional, se realizó en una finca con suelos francoarcillosos, de buen drenaje y una capa vegetal de 15 centímetros aproximadamente, ubicada en San Antero, Córdoba.   Este predio tiene una extensión de 700 hectáreas, de las cuales el 90% son útiles; el 50% de éstas se encuentran sembradas en pastos, principalmente angleton (Dichantium aristatum) y kikuyina o colosuana (Bothrochloa pertusa), el resto en pasto nativo y malezas, siendo las más abundantes el bicho (Cassia tora) y la zarsa (Mimosa pigra).   La topografía corresponde a tierras onduladas, de las cuales el 50% con pendientes del 5% y tierras planas con el otro 50%. Cuenta con variedad de especies arbóreas entre las que se destacan el matarratón (Gliricidia sepium), el campano (Samanea saman), el jobo (Spondias mombin) y el guásimo (Guasuma umlifolia); especialmente el primero se encuentra como cerca viva.   Tipos de ganado y suplementación   El ganado predominante sobre el que se hizo la evaluación es de tipo comercial resultado de cruzamientos de vacada Brahman con toros Holstein y Pardo Suizo. Es un ganado “mosaico” con tendencias a leche, adecuado para el sistema de producción doble propósito con un solo ordeño, donde las crías salen con las madres hasta medio día, luego se encierran hasta el día siguiente a la hora del ordeño.   Los media sangre de Holstein y Pardo Suizo se han apareado entre sí, logrando tener ejemplares trihíbridos, de mayor resistencia y producción.   Los ejemplares utilizados fueron 30 terneros de un mes de nacidos, los cuales fueron distribuidos al azar en dos grupos de 15.   Manejo   A los dos grupos se le suspendió, a partir del primer mes de edad, el suministro de leche y sólo estuvieron con las madres durante los ordeños (dos al día), como estimulantes de éstos.   Al terminar el primer ordeño, los animales se llevaban a potreros de pasturas de angleton y kikuyina en igualdad de condiciones, teniendo acceso al concentrado y al matarratón. Al finalizar el segundo ordeño, a las 2:00 p. m., permanecían en el potrero.   Igualmente, se les suministró, a los dos grupos, sal mineralizada y agua-miel; se desparasitaron al inicio del trabajo y recibieron baños antiparasitarios periódicamente. En estas condiciones se mantuvieron hasta los 120 días de nacidos. Se pesaron al inicio del ensayo y a lo largo de éste, con intervalos de 30 días. Diaria- mente se pesó la leche de las madres de estos terneros en los ordeños.   Calidad nutritiva de los alimentos ofrecidos   Los alimentos suministrados durante el experimento fueron: para el tratamiento 1, concentrado, de acuerdo con las recomendaciones del productor; y para el tratamiento 2, matarratón a voluntad, adicionados de sal mineralizada y agua-miel como saborizante. Las propiedades nutricionales de estos alimentos se observan en el cuadro 1.   Resultados   Consumo de suplemento y de matarratón: Durante los 90 días, el consumo promedio de concentrado comercial fue de 400 gramos por animal y el de matarratón de 710,3 gramos.   Ganancia de peso promedio: Al cabo de los tres meses, el grupo de animales alimentados con concentrado comercial obtuvo una ganancia de peso de 35,6 kilos, en tanto que los alimentados con matarratón ganaron 26,94 kilos. La diferencia de ganancia de peso promedio fue de 8,7 kilos.   Producción de leche: La implementación del sistema de crianza con suplementación permitió realizar un segundo ordeño al día, el cual reportó un incremento de leche a comercializar de 54,7 litros, que equivalen a un aumento del 32,73% sobre el volumen que tradicionalmente se obtiene en la explotación.   El beneficio/costo: Esta relación responde a la pregunta: ¿cuánto recibo de ingreso por cada peso que gasto? Teniendo en cuenta que el valor de kilo de ternero desteto es de $2.700, la comparación de la relación beneficio/costo es la siguiente:   • Para alimentación con concentrado comercial: por cada peso que gasto en concentrado, el ingreso es de $3,45. • Para alimentación con matarratón: por cada peso que gasto en matarrarón, el ingreso es de $45,51. En otros términos, el gasto realizado por alimentar los terneros con concentrado comercial es 13,2 veces más que el gasto efectuado al alimentarlos con matarratón.   Sin embargo, el ingreso total obtenido por la venta de animales alimentados con concentrado comercial arrojó una diferencia del 30 % por encima del alimentado con matarratón.   Otros beneficios * El suministro de material sólido, ya sea concentrado o forraje fresco, logra un rápido desarrollo del aparato digestivo de los terneros haciéndolos poligástricos a una edad más temprana que aquellos que tienen un suministro mayor de leche; * Adicionalmente, permitió alcanzar pesos al destete semejantes o mayores a los que se obtienen con la crianza tradicional, y elimina el estrés que éste produce, haciendo que la ganancia diaria posdestete se mantenga, en lugar de la pérdida que se observa en los terneros con mayor suministro de leche. * El uso de matarratón como suplemento reemplazó el 75,7% del concentrado comercial (medido por los pesos obtenidos por los tratamientos), y aunque la ganancia de peso del tratamiento 2 fue menor, la relación beneficio costo de esta suplementación supera en 13 veces a la del concentrado. * El sistema de crianza establecido permitió incrementar el volumen de leche a comercializar, porque se implementó un segundo ordeño en horas de la tarde. Estos dos aspectos contribuyen a incrementar el ingreso del productor y mejoran la rentabilidad de la explotación. * Los insumos locales deben ser utilizados en las ganaderías de la costa, como la alternativa más económica y eficiencia para enfrentar las épocas críticas generadas por los cambios climáticos y como herramienta para compensar la baja calidad nutricional de los pastos de la zona. * Finalmente es importante señalar que el costo de la dieta dos no se incluyó el valor de la melaza, y, en el caso del ordeño adicional, tampoco se incluyó los costos asociados a personal y manejo del hato, aunque con la escala de operación de esta hacienda parece que se realiza con el recurso humano actual.

Fuente: Carta Fedegan 118.