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Fenómeno de El Niño y La Niña, impactos en muerte de bovinos, desplazamiento de animales, preparar finca, ahorro de agua, producción de silos, reconversión a esquemas silvopastoriles, CONtexto Ganadero, noticias de ganadería colombiana.

Foto: El Pilón - ica.gov.co

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Enfrente El Niño con ahorro de agua y de comida

por: - 31 de Diciembre 1969

Tanto el fenómeno de El Niño como La Niña han ocasionado pérdidas a la ganadería bovina colombiana. Al país han llegado desde el 2010 y entre 2014 y 2016 ha enfrentado un Niño por año. Prepare su unidad productiva. Ahorre agua, conserve los afluentes y quebradas y reconvierta su finca a sistemas silvopastoriles semidensos y densos.

Tanto el fenómeno de El Niño como La Niña han ocasionado pérdidas a la ganadería bovina colombiana. Al país han llegado desde el 2010 y entre 2014 y 2016 ha enfrentado un Niño por año. Prepare su unidad productiva. Ahorre agua, conserve los afluentes y quebradas y reconvierta su finca a sistemas silvopastoriles semidensos y densos.   En los seis años en los que se han presentado los fenómenos de La Niña y de el Niño en Colombia se ha registrado la muerte de 377 mil bovinos y asimismo por las fuertes circunstancias ocasionadas en materia de intensas lluvias o de extenso verano, los productores se han visto en la obligación de desplazar 5 millones 629 mil cabezas.   Colombia ha tenido dos fenómenos de La Niña y cuatro de El Niño. Inició El Niño que tuvo lugar entre septiembre de 2009 y abril de 2010 y que ocasionó el 19,5 por ciento del total de la muerte de bovinos -74 mil- e igualmente el 24,6 por ciento de los desplazamientos -un millón 389 mil animales-. (Lea: Llega el fenómeno de El Niño)   Le siguió La Niña entre octubre del 2010 y junio del 2011 que ha sido considerada la de mayor impacto porque fue la causante del 42,5 por ciento del total de las muertes de ganado -161 mil bovinos-  y del 36,7 por ciento del desplazamiento -dos millones 68 mil animales-.   Estos dos han sido los de mayor impacto en el país. Recordemos que La Niña se caracteriza por las intensas lluvias mientras que El Niño por el verano y la sequía.   Posteriormente se registró otra Niña entre octubre de 2011 y marzo del 2012. Y enseguida se ha presentado un Niño por año -2014, 2015 y 2016-. Por fortuna en 2017 no hubo ninguno de los dos fenómenos pues permitió la recuperación en praderas y en producción.   Reducir impacto   “Lo ideal es que los cambios climáticos no impacten el ganado de esa manera tan negativa y tampoco las praderas. Que no haya muerte de bovinos y menos desplazamiento porque se pierden logros en peso y masa corporal que son difíciles de recuperar”, sostuvo Oscar Cubillos, jefe de Planeación de Fedegán.   Hay que preparar la finca para enfrentar cada uno de estos dos eventos ocasionados por los frecuentes cambios climáticos a nivel global.   “Es necesario acondicionar su unidad productiva para generar comida todo el año y de manera simultánea producir silos y ahorrar agua”, resaltó. (Lea: Conozca la calidad del suelo de su predio y sáquele más provecho)   Es una recomendación de la FAO organización que ha insistido al mundo en la racionalización en el uso del agua y en la conservación de los afluentes hídricos. (Lea: 14 opciones para tener agua en fincas ganaderas)   En la misma dirección lo hace el programa Ganadería Colombiana Sostenible con la reconversión hacia esquemas silvopastoriles con los que se establecen ecosistemas semidensos o densos con vegetación de árboles ya que permiten alternar los climas estacionales tanto de lluvias como de sequias prolongadas.