Con casi 30 millones de animales en todo el país, la campaña ejecutada por Fedegán-FNG junto con el ICA logró una cobertura histórica. Este resultado fue posible gracias a la articulación entre entidades sanitarias, gremios y más de 600 mil productores. Además de proteger la carne que comemos, impulsa el campo y abre puertas a nuevos mercados.
Colombia alcanzó un nuevo hito en materia de sanidad animal con el cierre exitoso del primer ciclo de vacunación 2025 contra fiebre aftosa, brucelosis bovina y rabia de origen silvestre, al vacunar 29.759.305 bovinos y bufalinos, logrando una cobertura nacional del 99 %.
Este resultado ratifica el compromiso del país con la protección de la salud animal, la seguridad alimentaria y el desarrollo de economías rurales sanas y sostenibles. La inmunización masiva de animales fortalece los sistemas productivos, permite el acceso a mercados internacionales y protege a miles de familias que dependen de la ganadería para vivir.
“Vacunar es proteger el campo. Este logro es reflejo del compromiso de nuestros productores por mantener a sus animales sanos y libres de enfermedades de control oficial. Desde el ICA seguiremos trabajando de la mano con Fedegán y todos los ganaderos para que Colombia siga siendo un referente en sanidad pecuaria”, afirmó Paula Cepeda, gerente general del ICA.
Estos resultados que benefician la ganadería del país, contaron con la articulación entre el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Fedegán y más de 600 mil productores ganaderos que atendieron el llamado a vacunar. En total, se intervinieron 602.980 predios, con una cobertura del 98,4 %.
Como parte del seguimiento y control, funcionarios del ICA supervisaron 11.340 predios y 2.719 vacunadores en todo el país, asegurando que el proceso se desarrollara conforme a los protocolos técnicos y sanitarios establecidos.
La vacunación no solo protege la producción pecuaria nacional, sino que también impulsa la Reforma Agraria, promueve la producción de alimentos sanos, y aporta a la paz desde el campo, al fortalecer las capacidades de las comunidades rurales y generar confianza en el territorio.
Con estos resultados, Colombia reafirma su liderazgo regional en sanidad animal y avanza con pasos firmes hacia una ganadería cada vez más responsable, sostenible y competitiva.