Esta práctica se ha consolidado como un método esencial en la reproducción bovina, permitiendo diagnósticos precisos y una mejor toma de decisiones. Giovanni Gnemmi, médico veterinario y director técnico científico de Bovinevet, destaca que la ecografía es indispensable para una gestión reproductiva eficiente, siempre que esté respaldada por profesionales capacitados y un correcto manejo de los hatos.
El uso de la ecografía en bovinos se ha convertido en una práctica común y necesaria para la reproducción y el manejo sanitario. Este método de diagnóstico por imágenes permite identificar la preñez en etapas tempranas, determinar la salud del sistema reproductivo y detectar posibles anormalidades.
De acuerdo con el Dr. Gnemmi, “no se puede pensar en un manejo reproductivo moderno sin un ecógrafo. Este es un examen complementario fundamental, pero debe ir acompañado de un conocimiento profundo de la fisiopatología reproductiva. Un ecógrafo sin un técnico capacitado no sirve de nada”.
Misión de Bovinevet
Bovinevet, empresa de la que el Dr. Gnemmi es director técnico científico, funciona como consultora global ofreciendo diagnósticos, capacitaciones y soluciones técnicas. Su objetivo es mejorar el manejo en las granjas para aumentar la productividad y prevenir problemas reproductivos.
“Normalmente, los problemas con las vacas están relacionados con el manejo. Si se manejan bien, es difícil que surjan complicaciones. Nuestro trabajo es comprender los fallos, formar al personal y proporcionar las herramientas técnicas necesarias para evitar errores”, indicó Gnemmi durante su visita a ReproduzMás, en alianza con Más Campo Biotecnología.
Ventajas de la ecografía bovina
La ecografía bovina es un procedimiento no invasivo que utiliza ondas de ultrasonido para generar imágenes en tiempo real del sistema reproductivo de las vacas. Permite la detección precoz de la preñez, la evaluación de la actividad ovárica, el diagnóstico de patologías uterinas y la identificación de fetos no viables, lo que contribuye a una planificación reproductiva más eficiente.
A nivel mundial, esta tecnología es fundamental porque optimiza los tiempos de producción, mejora la eficiencia reproductiva y reduce pérdidas económicas. Además, el uso de la tecnología Doppler ha perfeccionado el diagnóstico temprano de preñez y no preñez, permitiendo tomar decisiones estratégicas de manera oportuna. Por estas razones, la ecografía bovina representa un pilar en la ganadería moderna y un camino hacia una producción más rentable y sostenible.
Datos de interés
La ecografía permite diagnosticar si la vaca está cargada a partir de los 25-30 días de gestación, reduciendo el intervalo entre partos.
Contribuye a detectar patologías reproductivas que pueden afectar la fertilidad y la producción de leche.
Mejora la eficiencia en la selección de hembras y la programación de inseminaciones, aumentando la productividad del hato.
El uso de Doppler permite evaluar el flujo sanguíneo, optimizando el diagnóstico temprano de la viabilidad fetal.