Estados Unidos envió 192 000 toneladas de carne de res a China en 2022, superando a Australia, el que era el principal exportador, que exportó 185 000. Hasta hace apenas 3 años, el país oceánico envió 300 000 t a la segunda economía del mundo, mientras que EE. UU. apenas alcanzó las 10 000.

De acuerdo con el reportaje de South China Morning Post, el aumento de las exportaciones de carne bovina de EE. UU. a China es una consecuencia de la guerra comercial entre las 2 economías más grandes del mundo así como del aumento de las tensiones entre Beijing y Canberra en los últimos años.

Las exportaciones anuales de Australia a China de carne vacuna congelada y refrigerada fueron unas 185 000 toneladas en 2022, pero EE. UU. acaba de superarlo con 192 000 t de carne y despojos. (Informe: China y EE. UU., piezas claves en el comercio mundial de la carne vacuna)

Eso es un aumento marcado de las 6000 a 10 000 t que la primera potencia del mundo exportó al país asiático en 2018-2019, antes de que se firmara la primera fase de un acuerdo de guerra comercial que obligó a Beijing a importar más productos estadounidenses, señaló la autora. En consecuencia, la incursión de EE. UU. en el mercado chino se aceleró en 2020 y sus exportaciones estuvieron a la par con Australia en 2021.

China es uno de los mayores mercados de exportación de Australia. En 2019, Australia exportó poco más de 300 000 t de carne a China, antes de que en el transcurso de 2020 se produjeran medidas comerciales informales como la suspensión de las importaciones de mataderos australianos específicos.

Las exportaciones también se vieron afectadas por otros factores, incluida la menor producción de carne de vacuno provocada por la recuperación estacional de los rebaños. (Lea: Los países y las compañías claves en el mercado mundial de carne en los próximos 5 años)

Las exportaciones anuales de vino y algodón de Estados Unidos a China también han superado las de Australia. Los tres productos, y más fueron objeto de medidas comerciales que Beijing impuso extraoficialmente en 2020 después de que Canberra solicitara una investigación sobre los orígenes del coronavirus, lo que desmoronó las relaciones.

«Después de que se implementaron todas estas medidas comerciales, los estadounidenses siguieron diciendo que nos respaldaban, que se mantenían firmes con nosotros, pero están vendiendo más vino, más carne de res», dijo Geoff Raby, exembajador de Australia en China, al medio.

Además de verse directamente afectado por la guerra comercial, el deseo de Canberra de apoyar a Washington podría convertir a Australia en una víctima indirecta de la competencia entre ambas potenciales mundiales, agregó el antiguo embajador de Australia en China.

El futuro de las exportaciones de carne de Australia a China

Sin embargo, la mejora de las relaciones desde el cambio de gobierno del año pasado en Canberra había generado esperanzas entre los exportadores australianos de que ahora se puedan levantar algunas de las prohibiciones de importación. El actual primer ministro, Anthony Albanese, aseguró esta semana que la relación entre Australia y China «se ha vuelto más estable» y que visitaría Beijing si fuera invitado.

El ministro de Comercio de Australia, Don Farrell, dijo el jueves en una entrevista con la cadena estatal ABC que «en casi todos los aspectos en los que hemos tenido bloqueos comerciales o disputas, parece que se están logrando avances».

Aun así, los cambios geopolíticos podrían cambiar las cosas, expresó Stephen Olson, exnegociador comercial e investigador principal de la Fundación Hinrich, señalando las mejoras recientes en las relaciones bilaterales. Las exportaciones australianas a China podrían volver a superar a las de EE. UU. en las categorías de productos en las que compiten.

«Dado que las relaciones comerciales y diplomáticas entre Estados Unidos y China aparentemente van de mal en peor, las exportaciones australianas a China podrían volver a superar a Estados Unidos en las categorías de productos en las que compiten», dijo.

De otro lado, Australia también podría beneficiarse de una prohibición a las exportaciones de carne de res a China que Brasil se autoimpuso el mes pasado por un caso de enfermedad de «vacas locas», sostuvo Andrew Smith, jefe de desarrollo de agronegocios del Banco Rural de Australia.

«Esto podría significar que China buscará alternativas y probablemente aumentará sus importaciones mensuales de carne australiana si continúa la prohibición a la carne brasileña», indicó. (Lea: Brasil suspendió exportaciones de carne a China por un caso de vacas locas)

Si bien las exportaciones brasileñas suspendidas podrían reanudarse pronto, Smith señaló que EE. UU. podría reducir las exportaciones de carne dado que los productores buscan reconstruir sus hatos, lo que daría a las exportaciones australianas una ventaja en los mercados chino y asiático.