El senador resultó gravemente herido tras un atentado a tiros durante un evento en Bogotá, lo que ha generado una ola de reacciones en todo el espectro político. Las autoridades capturaron a dos sospechosos y no descartan que el ataque esté vinculado con amenazas recientes y su oposición al gobierno.
El senador Miguel Uribe Turbay, precandidato presidencial del Centro Democrático y figura clave del uribismo, lucha por su vida tras un atentado con arma de fuego perpetrado este 7 de junio en Bogotá.
Según información oficial, el ataque ocurrió hacia las 3:45 de la tarde, mientras el político lideraba un evento de campaña frente a la parroquia Los Discípulos de Emaús en Fontibón. Testigos reportaron que un hombre se acercó por detrás al legislador y disparó dos proyectiles que impactaron su cabeza y cuello.
Varios videos que circulan en redes sociales dejan ver la consternación de los asistentes al evento, mientras que varios miembros de su equipo de colaboradores cargan al senador ensangrentado hacia una ambulancia que lo trasladó al Medical Center de Engativá, donde permanece en UCI con traumatismo craneoencefálico grave.
La Policía de Bogotá informó que dos hombres fueron capturados en el lugar de los hechos, luego de que testigos los identificaran como los perpetradores del atentado. Tras un análisis especializado, miembros de la Fiscalía encontraron residuos de pólvora en los aprehendidos.
Asimismo, las autoridades precisaron que los sujetos serán presentados ante un juez de la República para legalizar su captura y respondan por el delito de tentativa de homicidio agravado. (Lea en CONtexto ganadero: ¡Ola de violencia arrasa el campo colombiano! 30 hechos delictivos en una semana)
Este terrible episodio se produce en un contexto de máxima tensión política: horas antes, Uribe Turbay había anunciado acciones legales contra ministros de Gustavo Petro por avalar el decreto de consulta popular, mecanismo que calificó de «amenaza a la gobernabilidad».
El senador, quien aparece en los lugares de vanguardia en las intenciones de voto presidencial según encuestas recientes, mantiene una oposición frontal a la «Paz Total», estrategia que en su discurso político vinculó directamente con el incremento de atentados durante su intervención en el Sexto Foro por el Futuro de Colombia el pasado abril.
La reacción política no se hizo esperar. Mientras el Centro Democrático convocó una rueda de prensa extraordinaria, figuras de todos los espectros –incluyendo a la canciller Laura Sarabia– condenaron el hecho y pidieron garantías para la contienda electoral.
Finalmente, las autoridades investigan si el atentado tiene relación con las amenazas recibidas por el equipo de seguridad del legislador durante la última semana.
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