Lafaurie explica a los ganaderos el “hallazgo” de La W

En una comunicación enviada el día de ayer a todos los ganaderos del país, el presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganadero (Fedegán), José Félix Lafaurie R., se refiere a la entrevista que la empresa de comunicación ‘La W´ le hiciera sobre las comisiones autorizadas por la Junta Directiva.

La comunicación es la siguiente:

Ganaderos de Colombia:

Me encontraba fuera del país, indagando sobre la posibilidad de llevar a Colombia nuevas tecnologías de transferencia de embriones, cuando me enteré de un nuevo escándalo lanzado en mi contra por la emisora “La W”, según el cual yo estaría recibiendo comisiones “indebidas”, o esa es, por lo menos, la percepción que queda cuando se lanzan acusaciones o insinuaciones aventuradas, sin investigación ni contexto.

Como le expresé al señor Julio Sánchez, en entrevista anexa a esta comunicación, que les invito a escuchar, no me interesa convencer a mis “odiadores”, porque nada de lo que diga les será suficiente, como sucedió durante los años difíciles en que esa emisora se unió al gobierno Santos para perseguir a FEDEGÁN y a su presidente ejecutivo.

Me interesa la opinión pública y, sobre todo, los 600.000 hombres y mujeres que, sin detenerse, contribuyen a “construir país” a través de la ganadería, en medio del caos generado por quienes hoy destruyen el esfuerzo de los colombianos en campos y ciudades.

Así pues, mi profundo respeto por los ganaderos, a quienes me debo, es el motivo y razón de estas aclaraciones.

El hecho**

Durante años la principal fuente de ingresos de FEDEGÁN fue la contraprestación que le correspondía por la administración de la parafiscalidad ganadera, suspendida cuando la persecución del gobierno Santos le quitó esa atribución de ley entre 2016 y 2018. No obstante, ya para ese entonces habíamos desarrollado líneas de negocios que le permitieran mayor autonomía a la Federación, lo cual, sumado a una política de austeridad, le permitió subsistir durante varios largos años sin su principal ingreso.

En 2019, cuando el nuevo gobierno restituyó a FEDEGÁN en su condición legal de entidad administradora del Fondo Nacional del Ganado, la Junta Directiva decidió fortalecer aún más su autonomía financiera, ampliando el portafolio de líneas de negocios que generaran ingresos y, a la vez, prestaran un servicio a los ganaderos, para lo cual creó un incentivo para el presidente ejecutivo, del 5% sobre las utilidades de esos nuevos proyectos.

En esa ocasión, un miembro suplente de la Junta Directiva, haciendo uso de su derecho legítimo y respetable de participación, envió una carta al presidente de la Junta, manifestando su personal desacuerdo con la decisión, tomada por unanimidad por los once (11) miembros principales y sin objeción alguna por diez (10) de los suplentes.

Los antecedentes

Como ya mencioné, el gobierno Santos desató contra FEDEGÁN una persecución sin antecedentes, motivado por las diferencias del gremio frente a las negociaciones con las Farc, la Reforma Rural Integral y la amenaza al derecho a la legítima propiedad de la tierra.

Desde el Ministerio de Agricultura y la Contraloría de entonces, se lanzaron acusaciones y se adelantaron investigaciones, amplificadas por varios medios, entre ellos La W, en una campaña de desprestigio que logró quitarle a FEDEGÁN la administración del Fondo Nacional del Ganado, y terminó en su posterior liquidación, con graves perjuicios para la ganadería, entre ellos la pérdida del estatus sanitario en 2018.

Hoy, sin embargo, lo importante para FEDEGÁN, y para mí como su presidente ejecutivo, frente a mi responsabilidad ante ustedes, ganaderos de Colombia, es que ninguna de las acusaciones pudo ser probada, porque, sencillamente, ninguna tenía sustento; y todas las investigaciones fueron archivadas por la Contraloría, la Procuraduría y la Fiscalía.

El “hallazgo” de La W

En ese contexto, no resulta extraordinario que, dos años después, un periodista de La W, pretenda construir un escándalo a partir de una carta que expresa apenas una opinión personal y que, además, es un documento interno de la Junta Directiva de FEDEGÁN.

Adicionalmente, mi falta de respuesta inmediata, por encontrarme en una zona rural, fue malinterpretada por la emisora, que se apresuró a divulgar su injustificado escándalo. En la entrevista, ustedes podrán formarse una opinión sobre la ligereza o mala intención de la periodista, a pesar de lo cual quiero precisar algunos puntos:

1) La Junta Directiva de FEDEGÁN aprobó un incentivo del 5% sobre las utilidades de nuevos negocios, para fortalecer su autonomía, lo cual es totalmente legal.

2) Los estipendios, bonificaciones y, en general, las formas de remuneración de las entidades gremiales a sus directivos, hacen parte del derecho privado.

3) Es falso que el presidente de FEDEGÁN reciba comisiones por “cerrarles negocios a sus agremiados”.

4) La administración de FEDEGÁN es totalmente separada de la administración del Fondo Nacional del Ganado, la cual, por mandato de la ley, tiene contabilidad aparte, es monitoreada por el Ministerio de Agricultura y través de informes trimestrales, y por la Contraloría en sus auditorías anuales.

5) La creación de líneas propias de negocios no solo le permitió a FEDEGÁN subsistir durante el atropello, sino que, su fortalecimiento hasta la fecha, ha permitido una muy importante consolidación patrimonial de la Federación.

6) Finalmente, mis ingresos como presidente ejecutivo no han sido nunca mi principal preocupación, como sí lo han sido el crecimiento y modernización de la ganadería colombiana, y el bienestar de los ganaderos. Aun así, no temo equivocarme al afirmar que están entre los más bajos de todos mis colegas en el sector agropecuario y en los gremios de la producción en general, lo cual, repito, es una preocupación menor frente al reto de liderar el proceso hacia una ganadería moderna, rentable, sostenible y solidaria: la nueva ganadería colombiana.

La ganadería, como el país, atraviesa momentos difíciles, no solo por la pandemia, sino por la insensatez criminal de quienes atentan contra el derecho al trabajo, la alimentación, la salud y la vida, mientras vemos leche derramada y animales que no pueden ser sacrificados. Por ello, mi mensaje es a continuar con el esfuerzo, a no perder la esperanza y, sobre todo, a no perder la con fianza en la institucionalidad. Mi padre me inculcó que no hiciera nada que me impidiera mirarme al espejo con la frente en alto cuando me afeitará cada mañana. Tengan la certeza de que nunca he desatendido su enseñanza.

JOSÉ FÉLIX LAFAURIE RIVERA**

Presidente ejecutivo