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Derecho a la propiedad de la tierra

Foto: minagricultura.gov.co

A la problemática de la violencia se suma la alta informalidad en la propiedad rural.

regiones

El derecho a la tierra se extingue: el campo está al borde del colapso

por: Angie Barbosa- 31 de Diciembre 1969

Para el especialista en derecho de tierras Camilo Díaz Obregón, el aumento de invasiones y la lentitud judicial creando un ambiente hostil para los ganaderos en varias regiones del país. Sin garantías claras de propiedad, el futuro de la actividad pecuaria queda en riesgo.

Para el especialista en derecho de tierras Camilo Díaz Obregón, el aumento de invasiones y la lentitud judicial creando un ambiente hostil para los ganaderos en varias regiones del país. Sin garantías claras de propiedad, el futuro de la actividad pecuaria queda en riesgo.


El derecho a la propiedad en el sector ganadero enfrenta un momento crítico. La combinación de invasiones crecientes, conflictos históricos y una marcada informalidad en la tenencia de la tierra está generando un clima de inseguridad para los productores.

Camilo Diaz Obregón, abogado especializado en derecho de tierras, advirtió que la situación no es nueva, pero sí se ha agudizado.

"Siempre ha existido una dinámica difícil para la gente en el campo. Tanto ganaderos como productores de alimentos en el país siempre se han tenido que enfrentar a temas de conflicto armado, invasiones a sus propiedades, amenazas y, en medio de tantas dificultades, han salido adelante, lo cual es admirable", dijo.

En regiones como el Magdalena Medio, el problema se ha hecho más visible en los últimos meses. Las invasiones de predios han aumentado y, aunque hay esfuerzos conjuntos entre el sector privado y las autoridades, la presión sobre la propiedad privada no cede. (Lea en CONtexto ganadero: Invasiones organizadas son el nuevo rostro de un viejo conflicto en el campo)


Estigmatización y violencia


Para Díaz Obregón, uno de los detonantes es un discurso que, en su opinión, alimenta la polarización en el campo.

“Hay discursos que, en muchas ocasiones, insinúan que las personas que desarrollan actividades ganaderas, de palmicultura, proyectos agroindustriales o agropecuarios son enemigos de los campesinos. Pero, finalmente, todos los que trabajan en el campo son personas del campo, como un campesino”, resaltó.

Este tipo de narrativas, asegura, ha motivado a que terceros tomen “por vías de hecho” la propiedad privada. En un escenario así, los ganaderos y productores no solo enfrentan pérdidas económicas, sino también riesgos para su seguridad personal.


Informalidad y lentitud judicial


A la problemática de la violencia se suma la alta informalidad en la propiedad rural. Díaz recuerda que su firma cumple 10 años en 2025 y que, en este tiempo, han detectado que muchos abogados evitan involucrarse en estos casos por la complejidad que implican.

“En el campo hay informalidad en la propiedad, en los linderos, problemas con las servidumbres y sucesiones de personas que desarrollan actividades sin tener sus documentos en regla. La informalidad en el sector rural es muy grande”, aseguró Díaz.

El panorama se complica cuando la justicia actúa con lentitud. Según el abogado, hay jueces que dilatan procedimientos esenciales, como las audiencias de amojonamiento, para evitar desplazarse a las zonas rurales. Esto obliga a los productores a buscar asesoría legal especializada para enfrentar obstáculos que, en teoría, deberían resolverse con mayor rapidez.


Ruta para enfrentar invasiones


En casos de invasión, Díaz recomienda actuar con inmediatez, reforzando una indicación que también resalta la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) desde su estrategia de Frentes Solidarios de Seguridad y Paz (FSSP).

"Lo primero es poner de inmediato en conocimiento a la autoridad de policía del municipio para que se active la ruta inmediata de recuperación de la propiedad a su estado anterior dentro de las siguientes 48 horas", indicó. (Lea en CONtexto ganadero: ¿Invasión de tierras como base del acceso a la tierra?)

El experto concluyó señalando que la ley obliga a la Policía a actuar en cuanto se denuncie una perturbación de la posesión, y el trabajo articulado con organizaciones como los FSSP y las Brigadas Solidarias Ganaderas pueden facilitar la recuperación del predio. Sin embargo, la efectividad de este proceso depende de la voluntad institucional y de que el propietario tenga su documentación en regla.