La producción lechera del departamento enfrenta una situación crítica que perjudica tanto a ganaderos como a la industria local. Sin embargo, existen canales de comercialización que podrían fortalecer su competitividad. Un informe de la Secretaría de Agricultura de la revela oportunidades para atender este problema y transformar el panorama.
La cadena láctea en Boyacá está en crisis. La caída en los precios, el bajo nivel de acopio por parte de la industria y la falta de estrategias de comercialización han generado un panorama incierto para los productores.
Se estima que el 60 por ciento de la leche del departamento no se acopia formalmente, lo que representa aproximadamente 1,2 millones de litros diarios. (Lea en CONtexto ganadero: "La ganadería de Boyacá debe avanzar en sostenibilidad y productividad": secretaria de Agricultura)
Según el informe "Análisis para el fortalecimiento de los canales de comercialización de leche bovina en el departamento de Boyacá" de la Gobernación, el departamento cuenta con aproximadamente 71.000 predios productores de leche, de los cuales 17.000 se dedican exclusivamente a la lechería especializada, mientras que el resto combina con la producción de carne en sistema doble propósito
El reporte señala que la crisis ha sido provocada por varios factores: el alto volumen de leche en polvo almacenado por la gran industria, el incremento de la producción debido a la mayor disponibilidad de forrajes y la disminución del poder adquisitivo de los consumidores, agravada por la inflación. Además, las recomendaciones médicas de reducir el consumo de lácteos y la percepción errónea de que la ganadería produce altos niveles de contaminación han contribuido a una baja en la demanda.
Canales de comercialización
El análisis de la cadena láctea de Boyacá ha identificado varios canales de comercialización que podrían optimizarse para hacer frente a la crisis.
El primero es la comercialización tradicional, donde la leche es acopiada por la industria. Sin embargo, muchas empresas han reducido la recolección debido a los costos de producción y los estándares de calidad. Las organizaciones que lograron mantener alta calidad no sufrieron la crisis, lo que evidencia la necesidad de mejorar la producción. Ejemplo de ello es la Cooperativa Multiactiva de Campesinos Emprendedores de Boyacá (Coocampo), que incluso en plena crisis solicitó mayores volúmenes de leche.
El segundo canal es robustecer la industria local, formal e informal, que absorbió gran parte de la leche que la industria grande dejó de recoger.
"Este canal necesita fortalecerse. Deben mejorar la calidad y articularse mejor con los productores, ya que actualmente no hay un sistema estructurado", aseguró Jorge Enrique Suárez Rojas, secretario técnico del Comité Regional de la Cadena Láctea de Boyacá y autor del informe, en entrevista con CONtexto ganadero.
Para fortalecer estas empresas, es necesario el acompañamiento de entidades como Invima y las cámaras de comercio, además de implementar marcas o sellos regionales
Un tercer canal es la venta de productos con valor agregado, como quesos y leche en polvo. La leche de razas criollas tiene características organolépticas distintas, lo que podría usarse como un diferenciador en el mercado.
"¿Por qué no aprovechar esas particularidades y agregar trazabilidad y valor agregado? Podría destacarse por su sostenibilidad ambiental y confianza para el consumidor", enfatizó Suárez Rojas.
Además, Boyacá produce productos ancestrales como el queso Paipa, chicharrón de cuajada y la almojábana, que podrían ser promovidos a través del turismo gastronómico, generando desarrollo económico y cultural.
Por último, el cuarto canal es la venta directa de leche cruda al consumidor, amparada por el Decreto 1880, que establece los requisitos sanitarios para su comercialización. Actualmente, se vende de manera informal en carritos y cantinas sin garantía de origen.
"Queremos que haya organizaciones de productores que cumplan requisitos sanitarios y vendan directamente. Si el productor vende su leche sin intermediarios, podría obtener hasta $2.500 por litro, lo que mejoraría sus ingresos", explicó Suárez Rojas.
Estrategias para fortalecer el sector
Para superar la crisis, es necesario que distintos actores trabajen en el fortalecimiento de cada canal. Según Suárez Rojas, en la línea tradicional, los productores deben mejorar la calidad de la leche con el apoyo de inversiones públicas.
En la industria local, entidades como el Instituto Nacional de Medicamentos y Alimentos (Invima), la Secretaría de Salud y las cámaras de comercio deben garantizar la formalización.
En cuanto a los productos con valor agregado, el sector privado y el turismo pueden jugar un papel clave en la promoción.
Finalmente, en la venta directa de leche cruda, se requiere un trabajo articulado entre productores, sector público y organizaciones gremiales.
"Desde la Secretaría de Agricultura tenemos el interés de fortalecer el sector y mejorar todas las condiciones de calidad para que la cadena tenga sostenibilidad. Queremos generar conciencia social para que los consumidores reciban leche de excelente calidad higiénica y composicional", concluyó Suárez Rojas.