Durante la más reciente asamblea general de miembros activos de la entidad, se llevó a cabo un conversatorio académico en el que se habló de los desafíos que tiene el campo en materia de seguridad alimentaria, salud y cambio climático.
Con el foro “Nuevos Senderos para la Transformación de la Agricultura”, organizado por la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria, Corpoica, se celebró la versión 23 de la asamblea general de miembros activos de la entidad, en donde se plantearon desafíos globales en materia de seguridad alimentaria, salud humana y cambio climático, como pilares fundamentales para este rubro de la economía. (Lea: Agricultura y ganadería ecológica, una alternativa sostenible)
El evento se llevó a cabo el pasado 25 de marzo y contó con la participación del viceministro de Agricultura, Hernán Román; el director ejecutivo de Corpoica, Juan Lucas Restrepo; y fue invitado Etienne Hainzelin, asesor de la Dirección General del Centro de Cooperación Internacional en Investigación Agronómica para el Desarrollo, Cirad de Francia.
Hainzelin, quien también es profesor invitado de la Universidad de Ottawa, sostuvo que es necesario aumentar la producción, pero con una visión radicalmente nueva del concepto de rendimiento, es decir, apuntarle a obtener bienes y servicios. (Lea: La agricultura de precisión se abre paso entre los pequeños productores)
"Lo que se espera hoy de la agricultura más allá de la producción, es una transformación. Hay que optimizar la biodiversidad vegetal como recurso para impulsar la intensificación ecológica. En el Cirad, se mira la pluralidad en la que no se trabaja en la parcela sino en el paisaje. Por ello, es preciso pasar de las soluciones que ya están listas, a unas hechas a la medida", reseñó el asesor internacional.
Frente a lo propuesto por Etienne Hainzelin, el director de Corpoica expresó que los científicos deben ser los encargados de motivar el cultivo y la protección de la biodiversidad, además hizo referencia a los sistemas locales de innovación que deberían ser apoyados para que los productores definan sus proyectos de intensificación y combinen las tecnologías y los conocimientos tradicionales. (Lea: La agricultura inteligente es la opción de hoy)
“El nuevo papel de los investigadores debería apuntar al cultivo de la biodiversidad, característica presente en nuestros campos, para transformar la agricultura beneficiando siempre a los productores”, argumentó Juan Lucas Restrepo.
Finalmente el viceministro de Agricultura aseguró que el futuro del agro está en hallar un balance claro entre este concepto y la ecología, en donde se proteja la biodiversidad del país. (Lea: El Sena apuesta por una agricultura inteligente)
El experto francés terminó diciendo que el papel de los científicos debe girar en torno a la necesidad de investigación básica del funcionamiento ecológico; los genetistas necesitan repensar su profesión y crear nuevas variedades, los agrónomos deben abordar los sistemas complejos, la combinación de múltiples especies, los ciclos sucesivos de cultivos, las nuevas prácticas y reconsiderar el concepto de rendimiento; y, finalmente, todos los investigadores deberán tener en cuenta el conocimiento local e interactuar personalmente con las realidades agrícolas.