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La salvo el recuerdo de un secreto de la abuela

Foto: Cortesía

El queso asado, inspirado en una receta familiar, se convirtió en el sello distintivo de El Cedral.

cronica

El secreto de su abuela le dio la fórmula del éxito: el queso asado que hoy marca la diferencia en el Caquetá

por: CONtexto ganadero- 31 de Diciembre 1969

Una ganadería del Caquetá halló en la tradición familiar y el valor agregado la fórmula para destacarse en el mercado. Gracias a un plan de mejoramiento ambiental, sus propietarios incursionaron en la producción de derivados lácteos diferenciados, entre ellos el queso asado, elaborado a partir de una receta heredada, que les abrió las puertas de las tiendas Queso Caquetá.

Una ganadería del Caquetá halló en la tradición familiar y el valor agregado la fórmula para destacarse en el mercado. Gracias a un plan de mejoramiento ambiental, sus propietarios incursionaron en la producción de derivados lácteos diferenciados, entre ellos el queso asado, elaborado a partir de una receta heredada, que les abrió las puertas de las tiendas Queso Caquetá.


El Cedral es una finca ganadera que en sus inicios mantenía esquemas tradicionales, pero con el tiempo y la experiencia implementó un plan de manejo ambiental que le permitió transformarse en una unidad productiva basada en la regeneración natural, la cero deforestación y la elaboración de derivados lácteos diferenciados, hoy reconocidos por su calidad y aceptación en el mercado.

Con 16 años de trayectoria, su núcleo productivo está conformado por vacas brahmolando —cruce de brahman con girolando— y un 35 % de hato de girolandas. Su proyección es avanzar en cruces con ganado criollo caqueteño para mejorar la producción de leche y la rusticidad del hato.

Su propietario participa activamente en espacios de formación y sinergias. Ha asistido a giras técnicas de Fedegán en Meta, Nariño, Eje Cafetero y Bolívar, y pronto participará en Cesar y Magdalena. También ha conocido experiencias ganaderas en Estados Unidos, Australia y Europa.


Plan ambiental


Del total de su área, el 64 % está dedicado a producción bovina, el 7,3 % a ordeño y el 36,5 % corresponde a reserva natural. El hato se compone en un 80 % de hembras, mientras que el resto son toros reproductores y terneros que se comercializan al destete.

Uno de sus logros más importantes ha sido la reducción del Intervalo Entre Partos (IEP), pasando de 465 a 395 días. Gracias a su plan ambiental, amplió el número de potreros de 4 a 41, implementó acueductos ganaderos y consolidó un sistema de pastoreo rotacional.

Actualmente, su capacidad de carga es de 3 animales por hectárea en verano y 1 en invierno, debido a los problemas de encharcamiento que afectan la producción de pasturas. Además, sembró 18.000 árboles que se suman a especies nativas como abarcos, pomarrosos, tachuelos, cachimbos y yopos.

Su perspectiva es seguir aumentando la eficiencia por vaca, tecnificar pasturas —hoy usa la variedad Panamá— e implementar fertirriego. (Lea en CONtexto ganadero: Queso del Caquetá no para de conquistar paladares, impulsar el desarrollo y contribuir a la sostenibilidad)


Valor agregado


En 2020 enfrentó una crisis: producía 80 litros diarios que vendía a $1.700, pero un invierno bloqueó las vías y el centro de acopio cerró, dejándolos sin comprador. La alternativa fue dejar de vender leche cruda y apostarle a la transformación.

El punto de giro llegó cuando la suegra del propietario recordó una receta familiar y le enseñó a preparar queso asado con un sabor especial que pronto conquistó el mercado. Desde entonces, ella supervisa y conserva las recetas.

Gracias a este valor agregado, en 2022 El Cedral fue seleccionado como proveedor de las tiendas Queso Caquetá (QC), por dos sellos diferenciadores: productor de leche proveniente de una reserva natural de la sociedad civil y finca vinculada al Pacto Caquetá de cero deforestación.

Hoy comercializa sus productos en cuatro tiendas QC —dos en Florencia y dos en Bogotá—, con un portafolio de 15 referencias avaladas por el Invima: quesos pera, asado y madurado (como el Kurkuma de hasta 12 meses), yogur griego y saborizado, mantequilla, arroz con leche, dulce de leche y, más recientemente, queso ahumado.

La finca prefiere crecer de manera responsable, cuidando la inocuidad y manteniendo la naturalidad de sus productos. (Lea en CONtexto ganadero: Nueva tienda de quesos Caquetá conquistará paladares en Bogotá)


Reconocimiento


“Es enaltecedor ver que una familia de ganaderos con un plan de manejo ambiental encontró la posibilidad de un nuevo mercadeo con productos diferenciales y particularizados”, manifestó Rafael Torrijos Rivera, presidente del Comité Departamental de Ganaderos del Caquetá.