Así lo confirmó Johana Fernández, presidente de Asosubastas, quien indicó que desde empezaron las protestas y bloqueos, se han dejado de comercializar más de 16 600 reses en todo el país. El panorama más complejo es el de Suganorte, en el Valle, que va para 3 semanas de total parálisis de las actividades.

El sector agropecuario y todas sus actividades adjuntas siguen padeciendo los efectos del paro que vive Colombia y que ya completa tres semanas de parálisis, bloqueos y serias afectaciones en todo el país. (Lea: En riesgo inminente animales en producción y mascotas por paro, denuncia Aprovet)

En diálogo con Johana Fernández, presidente de la Asociación de Subastas Ganaderas de Colombia (Asosubastas), hasta el pasado viernes, se habían dejado de comercializar más de 16 600 reses en todos los escenarios dedicados a dicha actividad. Esa cifra traducida en números equivale a una facturación de $25 100 millones. Considera que esta afectación no solo perjudica a las subastas, también lo hace con el productor que no está comercializando sus animales.

Para Fernández, las subastas se han convertido en una plataforma de comercialización para el pequeño y mediano ganadero, porque el gran ganadero, que tiene una oferta considerable, tiende a hacer ventas de ganado directamente en la finca. Es decir, el pequeño productor es aquel que en un viaje de ganado saca cinco vacas, cinco terneras, dos machos y un toro, es una mezcla lo que tiene en el predio.

“Ese pequeño productor es el que usa los servicios de las subastas, y la afectación actual recae en él, que es el que está teniendo muchas más dificultades para vender sus animales”, sostuvo. (Lea: “Pérdidas en el agro superan los $1,7 billones”: MinAgricultura)

No obstante, la presidente de Asosubastas abogó por el gremio de los transportadores. A su juicio, lo que representan esas 16 600 reses que se dejaron de movilizar, cuántos transportadores no pudieron trabajar ni llevar el ganado en un día de subasta. Haciendo unos cálculos aproximados sobre esa cantidad de bovinos que no pudieron llegar a los eventos, da más o menos 830 viajes que se dejaron de hacer a raíz del paro.

Sin embargo, hay otro aspecto que preocupa y son los empleos que se generan con ocasión de los eventos de subasta. Labores como auxiliares de corral, auxiliares de pista o los martilleros; gente que se contrata para el día de la actividad o que tienen un contrato a tiempo parcial. Esa afectación puede ser de unos 100 empleos directos.

“Cogasucre y Suganar han sufrido disminución de volumen de ganado; Subastar tuvo que cancelar los eventos en sus diversas sedes. El caso de Suganorte es aún más crítico porque va a completar tres semanas sin poder adelantar ninguna actividad. Cencogan (oriente antioqueño), Sugaberrío y Subacasanare también han debido recurrir a la cancelación de eventos”, reseñó. (Lea: Banco Agrario ofrece alternativas a productores afectados por los bloqueos)

Fernández, concluyó diciendo que las manifestaciones vienen “mancillando la moral”, toda vez que al escuchar las pretensiones de los promotores del paro, se evidencia cuánta desinformación, manipulación y pretensiones absurdas hay alrededor de la protesta. “Buscan resolver problemas estructurales que vienen afectando al país desde hace años”, remató.