default
Foto: Caracol Radio Bucaramanga (ilustración)

Cargando...

Nueva modificación al Decreto 1500 de 2007: más de lo mismo

Por CONtexto ganadero - 29 de Noviembre 2023

Foto: Caracol Radio Bucaramanga (ilustración)

Se suma a la farragosa proliferación de normas que modifican el Decreto 1500 de 2007 (Sistema Oficial de Inspección, Vigilancia y Control de la Carne y otros), el recién expedido Decreto 2016 el pasado 22 de noviembre, que reafirma el desconocimiento del gobierno actual de la normatividad por lo menos en lo que se refiere a la autorización de plantas de beneficio de autoconsumo


En uno de esos discursos que el presidente Petro suele espetar –y en no pocas veces para expoliar– dijo, por allá en noviembre del año pasado cuando su gobierno cumplía 100 días que, “Colombia no puede quedar en manos de un monopolio de frigoríficos de carne res, se ha llegado a ese punto por que el Invima acabó con la figura del matadero municipal, hay que dar vuelta atrás” –lo que se podría interpretar como si el Invima actuara por fuera del marco legal y no como consecuencia de la aplicación de unas normas–.

Argumentó que “se ha elevado el precio interno de la carne, no porque cueste más, sino por que la han equiparado al precio internacional que le pagan al exportador de ganado en pie, y el producto de eso es hambre en Colombia”, y que con la reapertura de los mataderos municipales se lograría bajar el precio de carne.

También se indicó –y las consideraciones del recién Decreto también las trae–, que entre los hechos que llevaron a modificar la norma están las consecuencias de ilegalidad y clandestinidad generadas por los cierres de las plantas; la necesidad de fomentar la formalidad, el empoderamiento de los alcaldes y gobernadores en su responsabilidad en el control de la ilegalidad y clandestinidad, así como en la promoción del consumo seguro; la necesidad de establecer estrategias para facilitar la destinación de los decomisos de carne y productos cárnicos comestibles efectuados por las diferentes autoridades, promoviendo la economía circular y considerando la transformación en productos diferentes al consumo humano, lo cual serviría adicionalmente en el control por parte de las autoridades.


Revivir lo que lo que no se ha muerto

El nuevo Decreto –el 2016– modifica en su artículo 2 el artículo 12 del Decreto 2270 de 2012, modificado a su vez por el artículo 2 del Decreto 1975 de 2019, el cual quedó así:

"Artículo 12. Plantas de beneficio animal categoría de autoconsumo. La planta de beneficio animal de categoría de autoconsumo es aquella autorizada por el INVIMA para abastecer de carne y productos cárnicos comestibles al respectivo municipio en el cual se encuentra ubicada, de conformidad con los lineamientos que para el efecto expida esa entidad.

Para la autorización de la planta de autoconsumo se debe demostrar el cumplimiento de los siguientes criterios:

1. La planta debe estar ubicada en un municipio de categoría 5ª o 6ª de acuerdo con la Ley 617 de 2000 o aquella que la modifique o sustituya.

2. Que en el municipio donde esté ubicada la planta no se encuentren autorizadas plantas de beneficio animal de categoría nacional.

El artículo el artículo 2 del Decreto 1975 de 2019 reza exactamente lo mismo. ¿Alguna diferencia? Sí, que ahora se les exigirá a estas plantas de autoconsumo estar incluido en el Plan de Racionalización de Plantas de Beneficio Animal adoptado en el departamento o que figure como no acogido.

Ahora bien, la pregunta obligada es porqué se cerraron las que se denominaban “mataderos municipales” (utilizando la expresión del presidente Petro: ¡mataderos!), e inmediatamente salta el recuerdo de las malas condiciones de sanidad en que se hacía el sacrificio, la corrupción de los mataderos y los gobiernos municipales, y la fragilidad financiera de los mismos por el poco volumen de sacrificio. Son razones que precisamente dieron vía al Decreto 1.500 de 2007, el cual promovió un marco regulatorio sanitario vigilado que sólo logró entrar en vigencia 9 años después de promulgado.

De otra parte, no es mucho el ejercicio matemático que se debe hacer para estimar que estas plantas de beneficio de autoconsumo difícilmente tendrán la capacidad de generar suficientes ingresos, de tal manera que les permita cumplir con los requerimientos de salubridad exigidos en el 1500. Es algo que no le contaron al presidente cuando espetó su genial idea de revivir los mataderos municipales, como tampoco la relación del precio interno de la carne y la exportación de ganado en pie. (lea en CONtexto ganadero: Se rasgan las vestiduras)


Noticias Relacionadas