3 dolores de cabeza de los ganaderos de Magdalena

La ausencia de un banco de maquinaria completo, la mala administración de las ciénagas y la escasez de agua, son las principales dificultades que deben sortear los productores de esa región del país.   Magdalena fue uno de los departamentos que más sufrió por cuenta del fenómeno de El Niño. El prolongado verano, la ausencia de alimentos para el ganado y la escasez de agua pusieron contra las cuerdas a los productores que apelaron a todo tipo de estrategias para mantener en pie a sus semovientes.   Sin embargo, los empresarios aún poseen serios problemas para mantener sus explotaciones. En diálogo con CONtexto ganadero dieron a conocer cuáles son los 3 dolores de cabeza que más los vienen afectando en este momento.  (Lea: Ganaderos de Magdalena buscan soluciones para enfrentar el verano)   Maquinaria   Wigberto Villamizar Sánchez, vicepresidente de la Asociación de Ganaderos de Santa Ana, Asogans, aseveró que en la zona tienen un banco de maquinaria que contiene 2 elementos: un tractor y un renovador de praderas. No obstante, reveló que en el departamento entre el 80 y 90 % de las tierras no han sido “civilizadas” o trabajadas como elementos adecuados para estimular la producción.   Indicó que por esa razón es pertinente adquirir sobsoladores que rompan la tierra y saquen los troncos que están en la profundidad, para posteriormente arreglar el suelo y sembrar pastos o especies forrajeras y así tener reservas de alimento. (Lea: El verano aún tiene padeciendo a los ganaderos en Magdalena)   “Al tener la maquinaria y ponerla a trabajar podemos armar unos bancos de alimentos por zonas, porque no es lo mismo traer suplementos desde Montería, que sale muy costoso. Lo ideal es que cada municipio o vereda que tenga su depósito de comida producida por nosotros mismos, lo que nos facilitaría la vida en épocas de crisis”, detalló Villamizar Sánchez.   El tema hídrico   La ausencia de agua es otra de las dificultades que deben sortear los ganaderos, debido a que en el departamento apelan a los jagüeyes para acceder al recurso. Sin embargo, esas estructuras con el tiempo se van desgastando, deteriorando y pierden su capacidad para almacenar el líquido; por tal motivo, los productores creen que la perforación de pozos profundos por zona es una alternativa más expedita para contar con el líquido vital.   “Con un pozo podemos armar un pequeño distrito de riego (...) Nosotros no queremos que nos regalen las cosas, sino que haya más apoyo para salir adelante”, enfatizó el productor.  (Lea: Ganaderos de Magdalena se quejan por escasa ayuda del Gobierno)   Ciénagas   En tanto, Roberto Herrera, representante legal del Comité de Ganaderos del bajo Magdalena, indicó que uno de los asuntos que el Estado debería resolver es la administración de la Ciénaga Grande, para que cuando se presentan veranos tan intensos como el que produjo El Niño que azotó al departamento, desde allí salga agua para algunos municipios como Pivijay, Remolino y Sitionuevo, y así haya disponibilidad del recurso en los playones en donde hay ganadería.   “Por ejemplo durante la sequía que padecimos, los productores tenían que llevar a pie a los animales a caminatas de 3 o 4 kilómetros para que tuvieran acceso al líquido vital, ese es un problema que el Gobierno debe solucionar y ver qué puede hacer con el panorama actual de las ciénagas, especialmente porque antes eso no sucedía”, reclamó Herrera.   Otro inconveniente que tienen los productores es el precio del litro de leche, ya que muchos acopiadores informales aprovechan las épocas de sobreoferta del lácteo para bajar su tarifa, lo que genera grandes dificultades económicas entre los empresarios pecuarios. (Lea: Ciénaga de Zapatosa en Cesar y Magdalena, a punto de secarse)