Recuperan terrenos usurpados dentro del parque Tayrona

El Estado colombiano inició este martes la recuperación de más de 100 hectáreas dentro del Parque Tayrona -de 15 mil hectáreas de reserva natural- en el norte del país, sobre el mar Caribe, que fueron usurpadas por particulares y eran usadas ilegalmente para el turismo.

De acuerdo con el Instituto colombiano de desarrollo rural (Incoder) y Parques Nacionales, cuando estos terrenos regresen al Estado serán conservados y utilizados para investigaciones académicas y científicas, educación ambiental y turismo ecológico. (Galería: Comenzaron los pagos por Servicios Ambientales para los ganaderos)

"La buena noticia para el país es que gracias a este tipo de acciones, comienza la recuperación del patrimonio natural y cultural que se alberga en los Parques Nacionales", declaró Julia Miranda, directora de Parques Nacionales.

El Gobierno del presidente Juan Manuel Santos creó una unidad especial para recuperar terrenos usurpados al Estado y que el presente año planea recuperar más de un millón de hectáreas, entre ellas, la mayoría del Parque Tayrona, uno de los parques naturales más importantes de Colombia.

Según el Incoder, de las 15 mil hectáreas (12 mil terrestres y 3.000 marinas) que conforman el Parque Tayrona, un 3% pertenece al Estado, y un 81% es considerado como propiedad de particulares en "discusión", sobre el cual se realizan varios procesos de verificación legal de propiedad.

El Tayrona posee cuatro tipos de ecosistemas: matorral espinoso y los bosques seco, húmedo y nublado. Asimismo, cuenta más de 770 especies de plantas y 350 especies de algas, en diversos pisos térmicos, que van desde el nivel del mar hasta 900 metros de altitud. (Lea: Ganadería y academia se la juegan por el medio ambiente en Caquetá)

Este parque tiene formaciones coralinas, playas, litorales rocosos, manglares y lagunas. Asimismo, se encuentran ruinas arqueológicas de antiguos asentamientos indígenas que datan de los siglos XV y XVI.

Allí habitan los pueblos indígenas Kogui, Arhuaco, Arsarios y Wiwa, quienes guardan estrechos lazos con la Sierra Nevada de Santa Marta, la montaña costera más alta del mundo con una superficie de 17.000 kilómetros cuadrados y picos nevados de 5.775 metros de altitud. (Galería: Pautas para certificarse en 'Buenas Prácticas Ganaderas')