India, un país que crece y se proyecta como potencia económica mundial

Aunque China sigue estando en la mira de muchos países que quieren expandir allí sus mercados y continuará siendo un destino muy importante, la realidad es que India se está convirtiendo en una verdadera potencia económica, con más población incluso que el primero.

Según S&P Global y Morgan Stanley, en 2030 India será la tercera mayor economía del mundo, por delante de Alemania, Japón y Reino Unido. Morgan Stanley cree que el valor monetario de los bienes producidos en territorio indio duplicará en 2031 los niveles actuales, superando así los 6 billones de dólares, de acuerdo con una nota de eleconomista.es

En cuanto a los factores que impulsarán el crecimiento económico de la India, S&P Global menciona la liberalización comercial y financiera, la reforma del mercado laboral, el capital humano y la inversión en infraestructura. No obstante, lo que cambiará el rumbo de la nación asiática será el plan del Gobierno de Narendra Modi, con el que pretende convertir al país en un centro exportador, así como en una potencia manufacturera. Para lograrlo, ofrecerá a los inversores nacionales y extranjeros incentivos en forma de rebajas fiscales y la concesión de licencias, entre otros.

A su vez, Focus Economics calcula que la India estará en el quinto puesto de la lista de potencias económicas mundiales en 2026, con un PIB nominal de 5 billones de dólares y el país asiático casi que doblará el valor de los bienes producidos en su territorio en 2022.

Los mayores impulsores del crecimiento indio serán el consumo interno, la inversión nacional e internacional, y las exportaciones.

Entre los posibles riesgos, FocusEconomics destaca el uso ineficiente de los recursos, la inclinación proteccionista del Gobierno del primer ministro Narendra Modi y las infraestructuras deficientes. (Lea en CONtexto ganadero: India, el país de los carnívoros silenciosos)

India tiene buenos antecedentes y se proyecta como un gran centro manufacturero con un mercado interno potencialmente enorme, con una clase media en expansión y con gobiernos que han logrado ubicar hábilmente a India en el centro del interés global. Corporaciones gigantescas, como Apple, han comenzado a trasladar parte de su producción al país.

La población

Según clarin.com, en 2022, la población de India superó a la de China y se espera que aumente en otros 26 millones en los próximos dos años (actualmente tiene 1.428 millones de habitantes). Los incrementos de población en India superan con creces las pérdidas en China, país donde su población comenzó a disminuir en 2022, con previsiones de más contracción poblacional hasta 2025.

A su turno eldiario.es indica que la edad media de la población en India es de 29 años, muy por debajo de los 38 en Estados Unidos y los 39 en China, que tienen tasas de envejecimiento superiores. En la India, los mayores de 65 años representan un 7 % de la población (el 14 % en China y el 18 % en EEUU); y llegaría al 30 % recién en 2100. La tasa de fertilidad india que en 1950 era de 5,9 hijos por mujer, ahora bajó a 2; pero aún tiene 360 millones de jóvenes en edad reproductiva.

La enorme cantidad de jóvenes en edad de trabajar constituye una oportunidad para acelerar el crecimiento económico y el desarrollo social, a condición de aplicar más recursos a las inversiones en capital humano para lograr promover oportunidades de empleo productivo y trabajo digno.

El 12 % de los científicos de EEUU son indios; igual que el 32 % de los matemáticos de la NASA. Las universidades e institutos tecnológicos de prestigio de India están sostenidos por el Estado, que dedica grandes recursos y becas a la formación universitaria y están convencidos de poder competir e incluso superar a las mejores universidades americanas, chinas o británicas. (Lea en CONtexto ganadero: India a la expectativa de una nueva edición del Jallikattu)

Otros factores

Por su parte, el analista y consultor de mercado, Esteban Moscariello, en Clarin.com, indica que el liderazgo del motor de crecimiento económico mundial se está trasladando de China a India y a países más pequeños en el este y sudeste de Asia.

Los datos muestran que las economías de India y Vietnam crecerán entre 5.8 % y 7.0% en 2024 y 2025, en comparación con el 4 % de China. Todo se centra en India y el sudeste asiático como impulsores del aumento de la demanda de productos básicos.

Durante las últimas tres décadas, China ha experimentado un crecimiento económico sin precedentes, impulsado por su capacidad de fabricación, consumo y proyección de poder a nivel mundial. Sin embargo, este período de expansión constante está llegando a su fin. El gobierno chino ha cambiado su enfoque de priorizar el desarrollo económico a enfocarse en la seguridad nacional y el poder geopolítico. Esto marca un giro importante en las prioridades de China y su comportamiento en el escenario internacional.

La economía china también se enfrenta a una desaceleración de las exportaciones, lo que afecta su crecimiento económico. Los expertos señalan que esta desaceleración no es solo cíclica, sino que refleja un cambio más profundo en las cadenas de suministro globales debido a tensiones comerciales con Europa y Estados Unidos. Esto amenaza la inversión extranjera y el consumo interno chino.

Por todo ello, el portal asnews.mx, indica que “es imperativo que el mundo esté atento al ascenso de India. Su trayectoria y potencial no sólo moldearán su futuro, sino también el panorama económico mundial”.