El Totumo aguanta inundaciones y veranos

Sirve para alimentar el ganado y también para tratar la mastitis, los golpes de los animales y la retención placentaria.   ¿Sabía usted que existe un árbol que ha sobrevivido a las severas inundaciones y también a las sequías ocasionadas por los cambios climáticos?   Se trata del Totumo que logra lo anterior gracias a que tiene raíces extensas y profundas que le dan un excelente anclaje y perfora el suelo como un taladro de pozos que le permite llegar donde está el agua para sobrevivir en época de sequías o inundaciones.    El Totumo se adapta a muchas variedades de climas, de latitudes tropicales y de suelos, desde ácidos hasta los alcalinos, húmedos, encharcables, secos, arcillosos y  pedregosos. Otra ventaja de este árbol es que el tronco y sus raíces, son porosos y esto le permite acumular oxígeno para su supervivencia. (Lea: Carta Fedegán edición 150).   Produce frutos durante todo el año y tiene tres variedades -Crescenta ajete, alata y amazónica-, que son genéticamente muy parecidas. Una recolección realizada por Astrid Ulloa Arango, de 58 germoplasmas de variedades de Totumo en las cinco regiones de Colombia y sus pruebas genéticas, así lo determinaron.   Según Ulloa, el Crescentia alata es de zonas altas de las sabanas y también se encuentra en zonas inundables de María la Baja en el departamento de Bolívar.   Fermentable en el rumen   La pulpa del Totumo es una buena fuente de carbohidratos altamente fermentables en el rumen. Es de destacar que las bacterias del rumen pueden aprovechar los nitratos que contiene el Totumo y en presencia de dichos carbohidratos convertirlos en proteína bacteriana y contrarrestar la toxicidad de estos cuando los bovinos los consumen.   El Totumo al ensilarse y secarse produce harina que es muy bien recibida por los animales como alimento. (Lea: Caso de éxito: ganadero produce a gran escala silo y heno)   En épocas de escasez de pasturas se suministra la pula a razón de 5 kg por vaca al día. Los bovinos diseminan las semillas en las excretas, lo que a la vez, reconvierte los potreros en un sistema silvopastoril.   El Totumo tolera bien el ramoneo, resiste varios cortes al año, da muchos frutos y poca sombra, por lo tanto, permite que el pasto crezca debajo de él. Además, tolera plagas y enfermedades y sirve para tratar la mastitis bovina, los golpes de los animales y la retención placentaria de las hembras.