Cundinamarca invierte $7 mil millones para mejorar las plantas de beneficio animal

La Gobernación de Cundinamarca ha destinado una importante inversión en la reactivación y fortalecimiento de las Plantas de Beneficio Animal en diferentes municipios del departamento. En total, se estima que la Gobernación invertirá 7 mil millones de pesos en este proyecto, lo que representa un gran impulso para la economía, la seguridad alimentaria de la región y mejorar la producción de carnes.

La estrategia busca reactivar la economía del departamento, y la de municipios con clara vocación agropecuaria. En este sentido, se espera que el proyecto beneficie a un total de 16 municipios, entre los que se encuentran Pulí, Útica, Anolaima, Chipaque, La Calera, San Francisco, Facatativá, Fómeque, Gachetá, Girardot, La Palma, Tabio, Choachí, Zipaquirá, Tibacuy y Simijaca.

De esta forma, Cundinamarca se convierte en uno de los departamentos que más ha invertido en este renglón de la economía.

Cabe destacar que la estrategia impulsada por la Gobernación de Cundinamarca se encuentra en manos de la Agencia de Comercialización del departamento, ACDC.

Según los reportes, esta agencia se encargará de coordinar todas las acciones necesarias para el éxito del proyecto, incluyendo la asignación de los recursos necesarios y la implementación de medidas de control y seguimiento.

Con esta estrategia, se busca diversificar la producción de carnes y generar nuevas oportunidades de empleo y crecimiento económico en los municipios con clara vocación agropecuaria. Sin duda, se trata de un proyecto ambicioso para el desarrollo de Cundinamarca y sus habitantes.

Inversiones anteriores en Cundinamarca

Hace dos año la Gobernación de Cundinamarca comprometió $2.180 millones mediante 14 convenios en el mismo sector. En esa oportunidad “la planta de Útica fue dotada con un cuarto frío, gracias a una inversión de más de $200 millones, de los cuales la ACDC, destinó $120 millones y el municipio $93”, aseguró el gobernador del departamento, Nicolás García.

Como en ese entonces, la administración seccional, hoy, persigue fortalecer ese renglón de la economía departamental desde el sector agropecuario. Busca, principalmente, “apoyar a los municipios en el cumplimiento de los estándares de la normatividad sanitaria vigente establecidos por el Invima. ” Un aspecto importante para estos estándares lo constituye la optimización de los procesos de sacrificio eliminando, o reduciendo sustancialmente, los riesgos frente a la calidad e inocuidad de los productos.