Fedegán espera ser recibido en la Casa de Nariño

Son conocidos los desacuerdos entre el Gobierno Nacional y el gremio ganadero en cabeza de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán.   Sin embargo, su presidente ejecutivo, José Félix Lafaurie Rivera, no dudó en asistir a la última reunión realizada en la Casa de Nariño con el Consejo Gremial Nacional, del cual hace parte Fedegán, como parte del proceso de acercamientos para la renegociación del Acuerdo Final con las Farc.

“Sin importar los desencuentros, la coyuntura del país exigía grandeza y actitud propositiva, sobre todo por parte de Fedegán, el único gremio que expresó reparos respetuosos a las negociaciones e hizo parte de los sectores defensores del No en el plebiscito, una posición que el país y el presidente mismo, terminaron reconociendo como legítima y positiva para la construcción de un mejor Acuerdo”. (Lea: Lafaurie espera llamado del Gobierno para hablar sobre Acuerdos)

En esa reunión, recordó Lafaurie, “en medio de mis colegas del Consejo Gremial, el presidente manifestó su disposición para acotar los temas que dieron lugar a los malos entendidos. De hecho, dio instrucciones para agendar una reunión con la junta directiva de Fedegán, que infortunadamente no se logró realizar como parte del proceso de acercamientos y renegociación que el Gobierno adelantó con buen tino, cuando habría sido muy fructífera para intercambiar opiniones sobre temas que afectan directamente a la ganadería, sobre todo en lo relacionado con la llamada Reforma Rural Integral”.

Para el presidente de Fedegán, al margen de situaciones incidentales y en ocasiones distorsionadas ante la opinión pública, las diferencias con el proceso de La Habana fueron la razón fundamental de los desencuentros con el Gobierno y, dentro de ese contexto, la cita con el presidente todavía es pertinente y muy importante para el gremio, sobre todo porque, conocidos los términos del Acuerdo renegociado, persisten serias dudas e incertidumbres que quisiéramos compartir con el primer mandatario, pues tal como está no responde a las preocupaciones en temas definitivos para los ganaderos y para el sector rural”.

“El derecho a la legítima propiedad de la tierra sigue siendo uno de ellos, pues a pesar de que se precisó que los mecanismos de expropiación se ceñirían a las normas vigentes y a la Constitución, la presión para conseguir 3 millones de hectáreas para el Fondo Gratuito de Tierras, unida a las dificultades conocidas frente a la recuperación de  baldíos y la extinción judicial de dominio, llevaran al Gobierno a utilizar intensivamente la expropiación administrativa y la extinción demonio por uso por uso inadecuado, en un entorno de legislación e institucionalidad ambiental que no garantizan el debido proceso. El riesgo no radica en que los procesos no se ciñan a la normatividad vigente, el riesgo está en que esas normas y la institucionalidad tienen muchos vacíos y pueden prestarse a interpretaciones subjetivas”, precisó. (Lea: ¿Y el campo qué?)

El dirigente saludó como positiva la creación de una Comisión que estudie a profundidad los temas de la tierra y haga recomendaciones al Gobierno, siempre y cuando la selección de los expertos consulte los diferentes enfoques de la problemática.   Lafaurie concluyó expresando que “esperamos que el señor presidente nos reciba con una comisión de la junta directiva o con la junta en pleno si es posible, y, por supuesto, ser convocados, como sector interesado, a la discusión de las propuestas de los expertos de la comisión creada en el nuevo Acuerdo Final.

Asegurí que el presidente encontrará en Fedegán, como siempre, a un gremio autonómo y vertical en sus posiciones, pero también propositivo; un gremio respetable, pero también respetuoso dentro de las relaciones que se esperan entre el Gobierno y un sector de la producción rural. (Columna: Un mejor acuerdo… es posible)    Lafaurie no quiso terminar sin antes ratificar que el gremio lamenta la recaída de salud del mandatario de los colombianos a quien aprovechó para desearle la mejor y más pronta recuperación.