Colectivos ambientales de Boyacá se fortalecieron con encuentro

El propósito de la actividad, que contó con la presencia de 30 grupos provenientes de todo el departamento, fue el de analizar las problemáticas ambientales que afectan a los boyacenses.   Con la participación de colectivos de 30 municipios se llevó a cabo el Tercer Encuentro de Colectivos Ambientales, en la ciudad de Tunja, un espacio que generó estrategias encaminadas al análisis de la problemática ambiental de la Laguna Palagua, en Puerto Boyacá, la delimitación del páramo de Pisba y los posibles pasivos ambientales que deja la producción de hidrocarburos. (Lea: Afirman que mejorar la productividad reduce el impacto ambiental)   “Tuvimos la participación de colectivos de las diferentes provincias y entre los ponentes contamos con la vinculación del Ministerio de Ambiente, la Región Central – RAPE, Fundación Paujil, la Red de Acueductos Comunitarios de Boyacá, entre otras organizaciones que propenden por el cuidado de los recursos naturales. Es muy grato demostrar que el gobierno departamental cree en el ejercicio de construcción desde el territorio”, comentó Giovany Viasus, director de Medio Ambiente, Agua Potable y Saneamiento Básico.   Por su parte Alexandra Gutiérrez, de la Red de Acueductos Comunitarios de Boyacá resaltó la importancia de estos espacios de conversación con los colectivos.   “Para la Red de Acueductos Comunitarios de Boyacá, es vital que la sociedad civil empiece a reconocer a los acueductos comunitarios como un actor ambiental importante en el territorio y no solo como prestadores de un servicio”, dijo Alexandra Gutiérrez. (Informe: ¿Cómo implementar las Buenas Prácticas Ambientales en ganadería?)   Entre las experiencias significativas, Carlos Andrés Durán, docente de la Institución Educativa Jairo Albarracín Barrera, sede Pueblo Viejo del municipio de Socotá compartió su historia y el trabajo meritorio que adelanta a pesar de la distancia, enseñando a los más pequeños sobre el cuidado del medio ambiente.    “Esta es la vereda más lejana del municipio, para llegar allí se deben recorrer 32 kilómetros a caballo y gracias a un gobierno departamental, que le apuesta a la educación, este año se logró abrir de nuevo la escuela luego de 5 cerrada debido a las secuelas de la violencia. Ahora es llegar y ver la esperanza en la mirada de los niños, con ellos inicié un proyecto de formación que busca el reconocimiento del territorio al igual que la fauna y la flora, convirtiéndose en guardianes del territorio. Gracias a estas iniciativas he recibido varios reconocimientos”, dijo el joven docente.   A esta versión acudieron colectivos de Santa Sofía, Moniquirá, El Cocuy, Sáchica, Paipa, Duitama, Siachoque, Chiquinquirá, Güicán de la Sierra, Samacá, Tasco, Monguí, Cómbita, Socha, Firavitoba, Sogamoso, Socotá, Ramiriquí, Tunja, Otanche, Mongua, Guacamayas, Villa de Leyva, Aquitania, Togüí, Corrales y Chita. (Columna: Cambio climático)