Conozca la iniciativa para integrar pagos digitales en el campo colombiano

La Fundación Capital, con el apoyo de Mastercard y Neumann Kaffee Gruppe, ha puesto a prueba un programa de pagos digitales en comunidades rurales de Colombia, para que los campesinos reciban entrenamiento en el uso cotidiano de productos financieros.

Entre 2019 y 2020, estas tres entidades empezaron a adaptar digitalmente a 86 caficultores de Pitalito (Huila) mediante Café Paga, creado para facilitar el acceso y el uso de servicios financieros formales y plataformas digitales, para desplazar su preferencia por el efectivo.

Esta iniciativa partió de la premisa de que no basta con entregar productos financieros simples, relevantes y personalizados a las necesidades de los productores de café. (Lea: Juan Valdez le apuesta a la transformación digital para aumentar el consumo)

También es necesario acompañar el proceso con programas de educación financiera, así como construir y fortalecer la aceptación de pagos electrónicos para que puedan usar los productos y servicios financieros fundamentales en la creación de un ecosistema de pagos digitales.

El objetivo fue identificar obstáculos y oportunidades al integrar los actores del ecosistema de pagos y de la cadena de abastecimiento del agro con el propósito de facilitar la digitalización y la familiarización con servicios financieros adaptados a las necesidades en las zonas rurales.

Específicamente, se buscó integrar a NKG con la Fintech Movii, que utiliza los canales de Mastercard, para que los pequeños productores reciban pagos más rápidos, fáciles y seguros. (Lea: Con simplifICA, el ICA avanza en su transformación digital)

Las lecciones derivadas de esta experiencia han adquirido especial relevancia en el contexto de la crisis actual, tanto para las empresas (que realizan sus pagos a contratistas, empleados y proveedores) como para los gobiernos (como el caso de pagos como Ingreso Solidario).

Algunos de los aprendizajes más valiosos del piloto de Café Paga y que se ha complementado con la amplia experiencia de Fundación Capital alrededor de ejercicios parecidos en 12 países de América Latina son:

1. Los pagos electrónicos permiten el acceso a los recursos y la adquisición de bienes esenciales de forma más rápida y segura, especialmente en las zonas rurales, donde realizar transacciones “cotidianas” (recargar el celular, pagar los servicios públicos o enviar plata a un familiar) es una tarea dispendiosa. Los participantes del proyecto Café Paga utilizaron su billetera digital para realizar recargas de celular y transferencias entre cuentas de Movii de sus familiares y amigos, y en algunos casos para hacer compras en establecimientos de comercio, donde adquieren insumos de cultivos.

2. Los pagos electrónicos establecen un vínculo entre los destinatarios de los pagos y el sistema financiero. Este primer vínculo de adopción ayuda a impulsar la inclusión financiera de las poblaciones económicamente más vulnerables de manera masiva y con costos razonables, reduciendo la brecha urbano-rural. Se abre la posibilidad de acceso y uso de una amplia gama de servicios financieros relevantes y pertinentes como ahorros, crédito, microseguros, que brindan un apoyo fundamental a los ciudadanos. (Lea: Blockchain se aplica con éxito en la industria de carnes en Argentina)

3. Pilotos como Café Paga ayudan a sentar las bases para la construcción de un ecosistema de pagos digitales, que pueden generar beneficios significativos para las personas y comunidades vulnerables, pero requieren un ecosistema que los integre, incentive y apoye. Es un esfuerzo a largo plazo que requiere esfuerzos conjuntos y coordinados de varios actores, tanto del sector público como del privado. La Fundación Capital y Mastercard implementaron dentro del piloto una estrategia de educación financiera que complementa esta línea de acceso, uso y consolidación financiera.

Federico Martínez, country manager de Mastercard Colombia, señaló sobre esta experiencia que fortalece las capacidades financieras a través de programas prácticos de capacitación y el desarrollo de conocimientos y habilidades: 

“Más allá de requerir medidas urgentes para abordar las consecuencias adversas de la pandemia, el COVID-19 ha brindado una importante oportunidad para avanzar en los cambios estructurales necesarios para establecer y fortalecer los esquemas de pago digital. Esto implica llevar productos y servicios financieros digitales simples y relevantes a las poblaciones más vulnerables”.