Panorama de El Niño en Colombia: siguen las sequias y está en riesgo el suministro energético

El fenómeno de El Niño, conocido por desencadenar sequías y otros eventos climáticos extremos, ha estado impactando a Colombia en los últimos meses y ha generado preocupaciones sobre el suministro de agua y energía, así como sobre la salud pública.

El panorama actual del país revela una reducción en el nivel de los embalses hídricos debido a la prolongada sequía causada por El Niño. Aunque aún no se ha alcanzado un nivel crítico, el Ministerio de Minas y Energía ha señalado la importancia de estar alerta ante esta situación. El ministro Andrés Camacho señaló: "Durante todos estos meses hemos enfrentado una dura sequía, gracias a la preparación del sistema y medidas que hemos adoptado, hemos logrado superar este periodo sin dificultades ni riesgo de apagón. Es un momento sensible dado que tenemos niveles bajos en nuestros embalses", explicó.

Transición hacia el fenómeno de la Niña

De acuerdo con las predicciones de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), se espera que el fenómeno de El Niño persista hasta mayo, con una posterior transición a un período ENSO-neutral, en el que ni El Niño ni La Niña están presentes..

Si bien algunas regiones del país continúan experimentando lluvias, la Costa Caribe y la zona noroccidental de la región Andina apenas están comenzando a sentir el impacto de las precipitaciones en abril, según proyecciones del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam). Esta variabilidad en las condiciones climáticas agrega complejidad a la gestión de recursos hídricos y agrava los desafíos asociados con El Niño.

Escasez en el suministro de energía

La firma XM, administrador del mercado de energía mayorista de Colombia, advirtió sobre la posible escasez en el suministro de energía y subrayó la importancia de implementar medidas de ahorro y eficiencia energética. Recomendaciones como intensificar el teletrabajo, reducir las exportaciones de energía, aumentar la generación térmica y monitorear los embalses son cruciales para garantizar un suministro energético estable en medio de las condiciones adversas causadas por El Niño.

Además del impacto en el suministro de agua y energía, El Niño también ha exacerbado otros problemas de salud pública, como el aumento de casos de dengue en América Latina y el Caribe. La escasez de agua y las altas temperaturas proporcionan un entorno propicio para la proliferación del mosquito transmisor del dengue, lo que representa un riesgo adicional para las comunidades afectadas por la sequía.

En el ámbito local, empresas de servicios públicos como EPM en Medellín han implementado medidas preventivas, como cortes de agua, para hacer frente al bajo nivel de los embalses causado por El Niño. Estas medidas buscan mitigar el impacto de la sequía en el suministro de agua potable y garantizar la disponibilidad del recurso para usos prioritarios.