Proyecto de economía forestal en Quindío entraría a revisión

Durante la primera reunión del Consea en 2013, la conclusión y solicitud fueron unánimes: modificar la Ley Segunda de 1959, que impulsa el desarrollo de la economía forestal.

El Comité de Adecuación de Tierras del Consejo Seccional Agropecuario, Pesquero, Forestal, Comercial y de Desarrollo Rural, Consea en el Quindío, llegó a un acuerdo entre sus directivos para elaborar un documento explicativo que será enviado al Gobierno Nacional,exponiendo la necesidad de plantear una reforma a la Ley Segunda de 1959.

La Ley Segunda de 1959 se firmó para el desarrollo de la economía forestal, la conservación de las aguas, los suelos y la fauna silvestre. Allí hay 7 zonas a nivel nacional, que comprenden 51 millones de hectáreas. “Estas áreas, por su naturaleza, son de utilidad pública e interés social y se han constituido por años en el principal elemento integrador del patrimonio ecológico y ambiental de la nación”, explicaun vocero del Ministerio del Medio Ambiente.

Sin embargo, los paneleros, cafeteros, integrantes de asociaciones, representantes de la academia e incluso los indígenas de la región, coincidieron en que la norma protege la sostenibilidad ambiental pero perjudica la productividad en el campo.

Para el secretario de Agricultura de Quindío, James Castaño Herrera, es necesario acatar la Ley, pero manifestó que esta propuesta es un apoyo para los productores del departamento y va de la mano con el plan trazado por la gobernadora del departamento, Sandra Paola Hurtado, de volcar la mirada y los esfuerzos hacia las zonas rurales.

“Vamos a conformar una comisión especial en el Comité de Tierra del Consea, para solicitar de manera respetuosa al Gobierno Nacional una revisión de la Ley segunda del 59, que ha tenido varios cambios, pero existe la necesidad de hacer un replanteamiento del tema en las áreas de conservación”, expresó el Secretario.

Por ahora, los gremios del departamento revisarán los instrumentos legales para mirar la factibilidad de que la Ley sea modificada o si es posible, derogada, lo cual beneficiaría a los

productores del Quindío.