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Foto: Israel Morales

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Las bondades de la raza Montbéliarde

Por - 03 de Noviembre 2015


Esta raza lleva 20 años en Colombia y apenas hay 600 cruces puros y 10.000 con razas cebú, pero sus características son ideales para enfrentar los actuales rigores del cambio climático.   La raza Montbéliarde viene de los montes de Francia, donde constituye el 95% de la producción de leche del departamento francés de Franco Condado. Sin embargo, se le encuentra en todo el país europeo y en el extranjero, porque es muy apreciada por su longevidad, su capacidad de adaptación y la calidad de su leche, que se ha utilizado para la elaboración de quesos en Francia.   La historia de la raza remonta a comienzos del siglo XVIII, cuando los ganaderos de la región suiza Oberland Bernés se instalaron cerca de la comuna francesa de Montbéliard, en Franco Condado. Gracias a un trabajo de selección metódica, este ganado obtuvo el reconocimiento oficial en 1889 durante la exposición universal en París.   De acuerdo a Israel Morales, presidente de Asociación Colombiana de Criadores de Ganado Montbéliarde y sus cruces, AsoMontbéliarde, esta raza llegó a Colombia gracias a su gestión hace poco más de 20 años.    Llegada a Colombia   Morales relató que cuando recorría una feria agrícola en California, Estados Unidos, en 1995, conoció a los representantes del Organismo de Selección de la Raza Montbéliarde de Francia, OS Montbéliarde. “Ellos me invitaron a su país y luego vinieron a Colombia, y comenzaron a vender el semen. Yo fui el primer cliente, compré el semen de 2 toros y comencé a inseminar las vacas”, contó.   Para ese entonces, él supuso que la raza existía y la buscó por todo el país infructuosamente. Aunque tenía su predio en Ubaté, Cundinamarca, decidió recorrer el país para saber si alguien ya conocía este tipo de bovino. Según el ingeniero agrónomo, su iniciativa de importar la raza fue la semilla de la producción de este ganado en Colombia, pues nunca supo de ella sino hasta ese momento.   Originalmente contaba con 30 vacas Holstein holandesas que inseminó con el semen de los toros Montbéliarde, y así inicio su ganado especializado. “Luego de hacer la primera compra de semen en el 95, yo duré 7 u 8 años aislado de los ganaderos, porque ninguno quería un ganado que fuera diferente al Holstein. Después de 8 años, mi finca creció, y la gente hacía cola para comprar las crías”, declaró. Así fue como llegó esta raza a Colombia.   Bondades de la Montbéliarde   Para ese entonces, Mario Romero, otro ganadero de Cundinamarca y dirigente de la distribuidora de semen Montbéliarde CMC Génetica SAS, conoció los beneficios de este animal. “Soy ganadero desde 2002, en la zona de Ubaté. Antes, todos mis bovinos eran Holstein y cruces con Jersey, pero en el 2010 conocí al señor Israel Romero, presidente de la Asociación Montbéliarde, que me mostró su ganado y me gustaron las virtudes de esa raza”, expresó.   Romero y su empresa, CMC Genética SAS, son los representantes de la casa francesa de la raza Montbéliarde, Jura Bétail. La entidad comercializa y distribuye el semen de esta casa, con la cual Romero ha trabajado para comercializar e incentivar los cruces con la raza. Para él, los beneficios de este tipo de ganado son evidentes:   Longevidad   La Montbéliarde está considerada como una de las razas más longevas, dando más de 6 lactancias en su vida de producción. (Lea: 3 utilidades de los búfalos, la especie más longeva de bovinos)   Morales contó: “Yo mantengo en mi hato 4 vacas de las más viejas que tienen 11 partos y todavía están produciendo. Las mantengo para mostrarle a la gente cuánto dura un animal de estos en producción. Hace más de 14 años que las tengo”.   Conteo de células somáticas   Es la raza número 1 en el conteo. Debido a su resistencia, estas vacas producen una de las leches más sanas. El indicador de células somáticas mide la cantidad de glóbulos blancos en la ubre. Cuando una res tiene mastitis, el indicador se dispara porque el sistema inmune ataca la enfermedad. (Reportaje: Ganaderos pierden entre el 10 y el 20 % de utilidades por la mastitis)   Según Romero, los promedios de conteo de células somáticas se han mantenido en niveles muy bajos. En 2013, fue de 120 mil, mientras que en 2014, obtuvieron un índice muy bajo con 85 mil. Para este año, el nivel se mantiene en 100 mil.   “Tenemos una salud y una higiene muy estrictas para poder brindarle un producto de calidad a las personas. Las empresas grandes ponen como límite 250 mil células somáticas para sus productos. Cuando los ganaderos registran un número más alto, se abstienen de comprar. Con todo el trabajo que hemos hecho, hemos logrado reducir el índice a 85 mil”, dijo.   Alto grado de proteína   43% de la leche producida por esta raza contiene kappa-caseína tipo B que ayuda en los rendimientos en fábricas queseras. La leche sirve para producir quesos madurados, por su alto contenido en sólidos totales. Según datos suministrados por el presidente de AsoMontbéliarde, sus reses registran 3,6% de contenido de grasa y 3,2% de proteína.   Producción de carne   Es una raza doble propósito, de una mejor rentabilidad en los terneros y vacas descarte. El valor de los terneros machos es muy apreciado por los ganaderos, así como la posibilidad de rentabilizar los sacrificios y los novillos. (Lea: 4 ganaderías doble propósito en Colombia con tecnología de punta)   Aunque en la región del altiplano se emplea principalmente para obtener leche, los animales cruzados con Montbéliarde tienen buena condición corporal. Israel Morales vende toros a ganaderías del trópico bajo, pues según él, al cruzar la Montbéliarde con las razas cebú, la mejoría es notoria.   “Generalmente un cebú tarda 3 años en tener 450 kilos. Con el cruce entre Montbéliarde y cebú, la gente envía los machos a sacrificio con 22 meses de edad y 500 kilos, o sea que casi que se ha acortado el tiempo de producción casi en la mitad. Las crías entre esas razas nacen con 10 libras más de peso”, afirmó.   Lechería y tradición quesera   Estas especies tienen alta productividad de leche con buen índice de grasa y proteína, por lo cual es reconocida en las fábricas queseras del Valle de Jura, en Francia.   En su predio, Morales habló de una producción de 20,4 litros antes del inicio del verano y las heladas, con lo cual alcanzaban un rendimiento diario de casi 7 mil litros. Luego de los embates del cambio climático, actualmente registran 17 litros diarios en promedio.   Por su parte, Romero fabrica quesos y yogures con la leche que obtiene de sus reses. En la curva de producción, has alcanzado picos de hasta 35 litros por día, pero en general se mantiene entre 23 o 24 en el resto de la lactancia.   “Nuestra filosofía es procurar siempre el bienestar animal. Preferimos un animal que nos dé parto/año, pero que nos enseñe, que no sufra de mastitis, que preñe fácil más terneros y terneras. Esa es nuestra visión de la ganadería. Este no es el animal para las personas que quieren vacas de 50 o 60 litros”, declaró.   Añadió que lanzarán una línea de productos naturales, evitando el uso de hormonas de crecimiento con el objetivo de tener una producción natural sin estresar a los bovinos. (Crónica: Samuel Correa: más de 30 años de trabajo por el sector agropecuario)   Fertilidad   La tasa de éxito en la región de Jura, de donde es la casa que representa Romero, es del 64% de vacas y 73% de novillas. De igual manera, los intervalos entre partos son más cortos y los productores corren con menos gastos veterinarios. Morales y Romero coincidieron en que las hembras pueden quedar cargadas a los 2 años.   “Tenemos una ganadería con muy buenos resultados. La gente puede venir a mi finca a verificar las estadísticas: son vacas que tienen 100 días abiertos, 73% de efectividad en el servicio, 1,5 pajillas por concepción, 388 días de intervalo entre partos”, expuso Romero.   Rusticidad   Los dos ganaderos destacan la rusticidad del animal, que lo hace muy resistente tanto a las enfermedades como a las adversidades climáticas.   Ambos citan estudios que concluyen que es la raza más adaptable, sobre todo porque tiene un temperamento dócil que permite que se acostumbre a cualquier ambiente. “Aquí las tengo en pastoreo, y en Nariño también. Incluso en Arauca, con esos calores, se han adaptado las crías de los cruces. Diría que su adaptabilidad también proviene de su fortaleza, porque es un animal muy resistente”, señaló Romero.   Además, afirmó que las crías Montbéliarde casi nunca se enferman. Contó que la última vez que estuvo en Francia, el présidente del OS Montbéliarde declaró en un encuentro de ganaderos que la raza prácticamente no necesitaba veterinario. (Crónica: Un modelo neozelandés para salir de la crisis lechera)   La tragedia   Cuando Morales ya había alcanzado posicionamiento en la región, ocurrió un desastre que casi hace desaparecer las primeras crías de la raza Montbéliarde en Colombia.   “Yo tuve muchas dificultades cuando llegaron las fuertes lluvias hace 8 años en Ubaté, que provocaron el desbordamiento de la laguna de Fúquene. Yo tenía un ganado grande y seleccionado, pero vino la primera de 3 inundaciones y se llevó más de 130 animales, entre esos había 70 terneras que estaban listas para distribuir. Eso retrasó mi trabajo”, relató Morales, el presidente de AsoMontbéliarde.   Romero también se vio afectado por estas inundaciones: “A finales de 2010, comenzamos a cruzar nuestras vacas Holstein con Montbéliarde, pero nuestros predios se inundaron y perdimos el 90% de nuestro ganado”.   Sin embargo, la tragedia no detuvo a ambos productores, que continuaron con su esfuerzo de dar a conocer la raza en todo el país. Morales arrendó un predio en el municipio de Pacho, Cundinamarca, donde instaló los animales que sobrevivieron, y Romero siguió trabajando y se posicionó como el representante de la casa Jura Bétail.   Futuro en el trópico colombiano   Poco a poco, los dos productores se han recuperado, trabajando en diferentes áreas para dar a conocer la raza e impulsar su expansión.   La labor de Romero es distribuir el semen de la casa francesa que representa y que los aconseja sobre los cuidados para criar los cruces que tiene con Holstein y Jersey.   “Cuando insemino una vaca Holstein o Jersey, como son más pequeñas, dejamos que ganen más peso. Hoy en día las inseminamos cuando alcanzan los 350 kilos. Le ponemos un toro Montbéliarde con alta facilidad de parto, y hemos tenido animales muy bellos. Ellos son trihíbridos, una mezcla de 3 razas. Entonces se expresan las mejores características: son ejemplares lindos, gruesos, de trompa corta y muy rentables”, manifestó.   De otro lado, Morales vende toros para ser cruzados con razas cebú en departamentos del trópico bajo como Cesar, Córdoba, Huila, Santander, Norte de Santander, Sucre y Tolima. Recordó una historia particular con una raza autóctona, Hartón del Valle.   “Esta raza fue olvidada completamente y casi se extinguió. Yo empecé a hacer cruces con Hartón del Valle y Montbéliarde, y los resultados fueron notorios. Una de mis mejores vacas de este cruce tiene 6 partos y es una de las más productivas”, contó. (Lea: Hartón del Valle, raza criolla resistente a la leucosis bovina)   A pesar de todas las dificultades por las que han atravesado, Israel Morales y Mario Romero están empeñados en mostrar las virtudes de esta raza francesa a todos los ganaderos de todas las regiones del país. Los dos están convencidos en que el ganado Montbéliarde soportorá los embates del intenso verano y ayudará a los trabajadores del sector pecuario a continuar con su actividad.

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