Área experimental Jardín Botánico de Bogotá
Foto: Jardín Botánico de Bogotá.

Cargando...

Jardín Botánico buscará conservar ecosistemas acuáticos

Por - 02 de Junio 2015

La iniciativa de la institución ubicada en Bogotá busca optimizar el uso del agua potable y el adecuado mantenimiento del material vegetal.


La iniciativa de la institución ubicada en Bogotá busca optimizar el uso del agua potable y el adecuado mantenimiento del material vegetal.   El Jardín Botánico de Bogotá inauguró recientemente un área experimental de plantas acuáticas, en la que se lleva a cabo la propagación vegetal de especies acuáticas y semiacuáticas. Tiene un área de 207 metros cuadrados y fue construida con el objetivo de fortalecer la investigación en la conservación de este tipo de plantas estratégicas y de ecosistemas como los humedales.   De acuerdo con Vilma Isabel Jaimes, vocera de la Línea de Colecciones Vivas del Jardín Botánico, desde el año 2012 se inició la primera fase de las obras de tecnificación, modernización y adecuación de invernaderos y áreas experimentales. (Lea: Abren diplomado para estudiar ganadería sostenible en Santander)   “Actualmente, el área cuenta con la optimización en el manejo del recurso hídrico y el mejoramiento de condiciones de mantenimiento del material vegetal por medio de la adecuación de un área exclusiva para su manejo, la inclusión de sistemas de recirculación de agua y la organización de zonas para el desarrollo de procesos de recepción, lavado y crecimiento de plantas”, aseguró Jaimes.   La construcción cuenta con conexiones hidráulicas de acueducto y se proyecta establecer una conexión con el reservorio de aguas lluvias e implementar un sistema de filtrado y oxigenación, que permita reutilizar el agua de las tinas de mantenimiento; de esta forma se busca disminuir el consumo de agua potable.   Este invernadero está conformado por 20 tinas en ecofibra con uno y 3 desagües, que conforman las siguientes zonas:   1. Zona de recepción de material vegetal: está conformada por 4 tinas de 4 metros por otro metro y 0,4 metros, cuenta con 3 drenajes que van desde los 0, 15 y 30 centímetros. “Aquí se ubica el material vegetal colectado en campo”, describió la vocera de la Línea de Colecciones Vivas del Jardín Botánico. (Lea: Programar el sistema de riego es posible gracias a la tecnología)   2. Zona de limpieza de material vegetal: está conformada por 2 tinas de 3 metros por otro metro y 0,15 metros y cuenta con drenaje, allí se realizan actividades de lavado del material vegetal colectado en campo.   3. Zona de mantenimiento 1: está conformada por 4 tinas de 4 metros por otro metro y 0,4 metros, cuenta con 3 drenajes que van desde los 0, 15 y 30 centímetros. Aquí se mantienen plantas emergentes de más de 1 metro, plantas de hojas flotantes, flotantes y sumergidas.   4. Zona de mantenimiento 2: conformada por 2 tinas de 3 metros por otro metro y 0,15 metros, cuenta con drenaje hasta 5 centímetros. En este espacio se mantienen plantas emergentes de menos de un metro.   5. Zona de preparación de sustrato y embolse: tiene un área de 9 metros cuadrados, cubierta con conexión eléctrica y poceta auxiliar.   “A esta área de propagación se trasladan las plantas acuáticas durante los últimos 2 años, en la que se mantienen 4.950 ejemplares de 12 especies acuáticas, 11 propias de los humedales del altiplano de la Sabana de Bogotá como: Carex luridiformis, Cyperus rufus, Eleocharis sp., Equisetum bogotense, Juncus densiflorus, Juncus effusus, Juncus microcephalus, Juncus ramboi, Ludwigia peruviana, Marsilea ancylopoda, Schoenoplectus californicus y una de páramo: Equisetum giganteum”, detalló Vilma Isabel Jaimes. (Lea: El pago por Servicios Ambientales para los ganaderos es una realidad)   De acuerdo con el Jardín Botánico de Bogotá, con la entrega de esta nueva obra se fortalece la línea de investigación en plantas acuáticas y el desarrollo de estudios bajo condiciones controladas, se tienen en cuenta aspectos como el rastreo de características físico-químicas del agua y diferentes sustratos.   Además, se adelantará el seguimiento de los resultados obtenidos y su aplicabilidad en otros espacios, como los Humedales de Bogotá o como los que se incluirán en los ambientes del nuevo Tropicario.