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Foto: infortambo.cl

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Control estratégico de parásitos, una necesidad en el hato ganadero

Por - 29 de Diciembre 2021

Cada vez más se tiene la necesidad de programar controles estratégicos de parásitos tanto externos como internos, del ganado vacuno, dependiendo del tipo de explotación.


Cada vez más se tiene la necesidad de programar controles estratégicos de parásitos tanto externos como internos, del ganado vacuno, dependiendo del tipo de explotación.

El planteamiento lo hizo el MV y Director Técnico de Ganadería del Laboratorio Carval, Rodrigo Bonilla Quintero, en un artículo en infortamboandina.co, donde señaló que “hoy en día con las limitaciones que tenemos en la producción de alimentos de origen animal por el tema ambiental, inocuidad y la problemática cada vez más frecuente de la resistencia parasitaria tenemos la necesidad de hacer controles estratégicos”.

Sin embargo, dijo, para pensar en estrategias se debe saber primero cuáles son los órganos afectados directamente por los parásitos en los bovinos y algunos de ellos son: el hígado, intestino grueso, intestino delgado, pulmón, rumen y el abomaso. (Lea: Las pérdidas directas que ocasionan los parásitos internos)

Así mismo se debe saber cuáles parásitos afectan estos órganos. Por ejemplo, al hígado lo afecta el Fasciola y Dicrocoelium; al intestino grueso el Oesophagostomum y Trichuris; al intestino delgado el Bunostomum, Nematodirus, Trichostrongylus, Cooperia, Chabertia, Moniezia, Capillaria y Toxocara. El Dictyocaulus al pulmón, el Paramphistomum al rumen y el Ostertagia, Haemonchus y Trichostrongylus al abomaso. 

Cada parásito depende del clima y la zona geográfica donde se encuentre. Cuando los animales están infectados y tienen lesiones, afectan directamente su salud causando daños que se reflejarán en la pérdida de la productividad. Por lo general, suelen ser clínicas pero a veces al tratarse de parásitos internos, no se logra saber específicamente cuáles son, “finalmente debemos tener un diagnóstico y poder instaurar programas de control para escoger tratamientos adecuados, de manera estratégica, bajo el esquema de la prevención. Lamentablemente, sucede que solemos darnos cuenta cuando el daño es avanzado”, señaló.

Cuando los animales están infectados por Helmintos de forma crónica, se observa pérdida de peso, mala condición corporal y diarreas intermitentes. Las helmintiasis parasitarias provocan alteraciones que pueden pasar desapercibidas, salvo en casos donde el nivel de afección es muy elevado y los bovinos presentan mala condición corporal. Estas lesiones disminuyen la eficiencia en la digestión, reproducción y producción de leche, pudiendo disminuir hasta un 14 %.

Por su parte, la paramfistomosis provocará disminución de conversión alimenticia, pérdida de peso corporal, menor producción de leche y un 33 % menos en el índice de fertilidad. La presencia de helmintos en el intestino y abomaso, como por ejemplo nematodos, causa graves alteraciones en la mucosa experimentando rupturas que afectan directamente a la absorción de nutrientes y por ende a la productividad.

Para comenzar a pensar en estrategias posibles de control, Bonilla Quintero aclara que debe tenerse en cuenta la nutrición como una de las cosas más importantes, “si los bovinos se encuentran bien alimentados, tendrán mejor respuesta frente a los parásitos”. (Lea: ¿Dónde se hace el control de parásitos, en bovinos o en pasturas?)

Como los parásitos se encuentran en el pasto, es necesario tener un buen manejo del suelo haciendo la rotación correcta. Una buena estrategia según Bonilla Quintero, amerita el uso de un tratamiento farmacológico ideal, y destacó la importancia del diagnóstico, ya que conociendo a qué nos enfrentamos sabremos con qué debemos hacerlo.

“Hoy en día se está trabajando en el control biológico, estudiando el control con hongos parasiticidas. Sin embargo, se descubrieron hongos con el poder de invadir las formas parasitarias pero no las formas benéficas que hay en el ambiente. Además, también se está trabajando sobre el desarrollo de vacunas, buscando por genética, hacer una selección de razas que sean más resistentes a los diferentes climas, ecosistemas y parásitos”, manifestó.