El 42% de los consumidores creen que declaraciones culpando a la carne y los lácteos son erróneas

Investigación realizada en Reino Unido revela algunas de las barreras que se están presentando en el mundo actual para el mantenimiento de una alimentación saludable. Hoy los consumidores están cambiando su manera de pensar acerca de algunos alimentos.

El portal TheCattleSite explica que de acuerdo a un estudio de la Junta de Desarrollo Agrícola y Hortícola (AHDB), al elegir qué comer, el 55 % de los consumidores afirma que la salud es importante. Sin embargo, solo el 28% de las porciones totales de alimentos y bebidas se eligen por razones de salud, siendo el disfrute (78%) y la practicidad (56%) los principales factores impulsores detrás de los alimentos y bebidas que consumen. (Lea: Aportes nutricionales de carne y leche de ganado alimentado con pasto serían mayores)

El informe de Rachel Rose, analista de información del consumidor de AHDB, expone que el 64% de los consumidores está de acuerdo en que comer sano es más caro. Por lo tanto, ofrecer una buena relación calidad – precio al consumidor es vital, ya que el precio es un factor clave detrás de lo que se consume.

Además, una investigación anterior de AHDB descubrió que en tiempos de presión económica como la crisis crediticia en 2008 y el periodo previo al Brexit, la salud se vuelve menos prioritaria a medida que los consumidores buscan la comodidad y los alimentos para sentirse mejor.

El informe también encontró que el 42% de los consumidores no están seguros de que las declaraciones nutricionales sean correctas, ya que los consejos cambian con regularidad y hay una multitud de información errónea, especialmente en términos de declaraciones de propiedades saludables negativas cuando se trata de carnes rojas y lácteos.

Otro 50% tiene dificultades para leer las declaraciones nutricionales en los envases, pues el texto es demasiado pequeño y los iconos utilizados pueden resultar confusos. Los consumidores necesitan identificar y comprender el beneficio tangible que obtienen al comprar alimentos que tienen beneficios positivos para la salud, como la carne roja y los lácteos. (Lea: Aspectos que tienen en cuenta los consumidores sobre la carne de res)

Además, la actual crisis de salud ha tenido un gran impacto en la salud mental y física de los consumidores, con un 41% afirmando que la salud mental ha empeorado y un 33% afirmando que su salud física se ha deteriorado. Un estudio realizado por el Instituto de Estudios Fiscales (IFS) encontró que debido a las restricciones gubernamentales y los consumidores que pasan más tiempo en casa, el 90% de los hogares aumentaron su ingesta de calorías durante la pandemia.

Este aumento fue impulsado por la comida para llevar, que alcanzó su punto máximo en más del doble del nivel anterior a la pandemia.

Además, se señalaron oportunidades claves dentro del sector alimentario. Con más personas trabajando desde casa, se dice que hay una gran oportunidad para fomentar almuerzos caseros más saludables, que podrían incluir carnes rojas o lácteos.

A medida que las familias enfrentan presiones financieras, quienes hayan regresado al trabajo podrían beneficiarse de un almuerzo para llevar, que también podría incluir productos lácteos como queso y carnes cocidas en rodajas.

Finalmente, las recetas más saludables podrían reducir el costo de las comidas para llevar semanales. Es importante resaltar que también existe la oportunidad de incluir carnes rojas y lácteos, concluye la investigación.