(INFORME) Tres razas ganaderas para producir carne poco conocidas en Colombia

En esta oportunidad se hablará de tres razas ganaderas de carne que son poco conocidas en Colombia pero que por sus atributos y características podrían funcionar bien en nuestro medio.

Se trata de las razas blanca cacereña, la berrenda, y la Salers, las dos primeras de origen español y la tercera de Francia.

Algunas de ellas están en peligro de extinción porque no se ha continuado con su explotación debido a que hay otras razas que las han remplazado, según Antonio del Dago de Hacienda La Verónica.

Entre las características de estas razas se destacan el ser animales de más carne con menos tiempo para su producción, mejor calidad y mejor canal. (Lea: Un recorrido por el fascinante mundo de las razas bovinas conquistadoras)

La blanca cacereña, como su nombre lo indica es originaria de la provincia de Cáceres (España), una raza muy rústica que está en peligro de extinción, tiene un inventario bastante bajo y se caracteriza por ser productora de carne de buena calidad.

Son animales que se adecúan a sitios agrestes, a difíciles pasturas, a zonas de montaña, a sitios donde hay escasez de pastos, que en todo caso son difíciles para producir.

Es una raza de origen español, sus animales son de una talla mediana, de color blanco de piel y de mucosas rosadas. Sus hembras adultas rondan entre 450 y 550 kilos y los machos de 600 a mil kilos.

Se dice que en su origen fueron traídas por los romanos para ser sacrificadas al dios Júpiter, una raza que es rústica adaptada y que en este momento tiene muy poco inventario llegando a 500 animales en total por lo que es una raza protegida y con la cual se están haciendo estudios para evitar que se extinga. Aunque es muy buena productora de carne esta raza se utilizaba principalmente para trabajo.

Raza berrenda

Esta raza también es de origen español y es más fácil de reconocer para aquellos que asisten a las corridas de toros donde estos animales salen acogidos por unos bueyes de color rojo o negro. (Lea: Europa se preocupa por proteger sus razas criollas)

Se trata de la raza berrenda donde se encuentran animales de ambos colores (rojo y negro) y que se utilizan para el trabajo pero también para la producción de carne. Además se sigue utilizando para llevar al corral esos toros que son indultados o que no se van a utilizar en una determinada corrida y se deben retirar de la plaza.

Son animales de talla mediana, muy dóciles, fáciles de manejar. Las hembras adultas pueden llegar a pesar hasta 600 kilos mientras los machos alcanzan los 900 kilos siendo animales muy gruesos, de buen tambor, muy rústicos y que pueden ser utilizados como bueyes para la carga.

De esta raza se pueden encontrar en América algunos ejemplares, especialmente donde hay ganaderías de lidia.

También se encuentra en peligro de extinción porque se dejó de utilizar debido a la entrada de otras razas productoras de carne o porque se le da prelación a animales importados para producir leche o carne y se deja de lado el material genético importante que son las razas autóctonas.

Se estima que en la actualidad hay alrededor de 2.500 animales de esta raza en el mundo y por eso se trabaja para su conservación. (Lea: 1.600 kilos de la mejor carne del mundo)

Raza salers

La tercera raza no es muy conocida en América, es la Salers, de origen francés, especializada en la producción de carne.

No tiene ningún problema de extinción y de la cual hay una buen inventario en Europa, alrededor de 600.000 cabezas, porque produce una carne de muy buena calidad.

A los 15 meses se pueden tener animales que estén por arriba de los 450 a 500 kilos, por lo que tienen una buena ganancia de peso y son muy productivos.

Sirven tanto en puros como en cruzamientos con razas cebuínas como las que se tienen en Colombia.

Su color es colorado, pelo abundante, muchas veces rizado, son animales para climas fríos principalmente pero son muy rústicos ya que han tenido que sobrevivir en condiciones adversas y son capaces de consumir pasturas pobres pero producir bastante cantidad de kilos y ser eficientes en la producción de unas buenas canales. (Lea: Así fue como se salvó la raza bovina longhorn de su extinción)

Otra de sus características es que tienen un sistema mamario bien insertado, unas ubres bien hechas y son capaces de producir en el periodo de lactancia entre 5.000 y 6.000 litros.

Esto hace que los terneros o terneras que se levanten con estas vacas van a llegar al destete con un peso bastante bueno.

Estas tres razas que en sus países de origen se utilizan para carne, en Colombia se podrían tener para doble propósito en zonas donde se pueden adaptar sin mayores dificultades. Incluso se podrían utilizar con un tercer propósito como es el trabajo en la finca, concluye del Dago.