¿Se considera un empresario ganadero tradicional o uno exitoso? Aquí están las diferencias

Argumentar bien las cosas para tomar decisiones acertadas en ganadería no es una tarea fácil para los ganaderos porque muchos siguen manejando sus negocios basados en principios totalmente tradicionales en un mundo que está dando pasos gigantes.

Luis Fernando Méndez, ingeniero agrónomo y gerente de Zootech Energytech SAS, indica en una charla con Fedegán que hay que pensar en una pregunta, “cuál es la diferencia entre un empresario tradicional y uno exitoso. Si nos hacemos esta pregunta sin duda hayamos la respuesta en el nivel de retos operativos que tiene un empresario exitoso”. (Lea: Es mejor la ganadería sostenible que la tradicional)

El empresario ganadero exitoso tiene claro su objetivo, razón por la que se vuelve su obsesión. Este propósito es ejecutar un plan financiero de retorno de inversión, es decir que se puedan obtener excelentes frutos de todo el esfuerzo.

Por ejemplo, “si los invitaran a participar en un negocio y tienen que poner 100 millones de pesos, ¿cuál es la primera pregunta que se harían? La respuesta es cuándo se retorna la inversión y con qué rentabilidad va a retornar la inversión”, manifiesta Méndez. 

Para el profesional, este es un tema que en ganadería de carne no se analiza porque se tiene la tierra, el ganado, se quiere la sostenibilidad del negocio, pero no se tiene claro el tiempo en el cual se retorna la inversión del activo fijo que hay en el negocio.

“Cuando empezamos a preguntarnos eso y a ponerle disciplina a la actividad, el negocio empieza a ser negocio”, menciona Méndez quien añade que hay que preguntarse qué pasa cuando se invierte en un negocio.

Siguiendo con esa pregunta, el primero de los pasos es que se destina un dinero para poner en marcha y depuración operativa el negocio. Esta podría catalogarse como una de las diferencias entre el empresario tradicional y el exitoso, porque el primero pone en marcha el negocio, le da sostenibilidad económica y operativa y cuando siente que ya puede durar en el tiempo hay una realización empresarial porque perdura. (Lea: ¿Quiere tener éxito en la ganadería? Siga los protocolos)

“Pero un empresario exitoso empieza a ponerles pautas en un plan de negocios a su inversión y ahí comienza a tener alta exigencia operativa y altos retos financieros que se van a llevar a unas situaciones. Una de estas es que se consolide el negocio y que viva por sí solo durante largo tiempo para que genere continuos dividendos año a año”, expone Méndez.

El segundo de los pasos hechos por los empresarios tradicionales es que con los retos operativos y financieros se empiece a crear un plan de retorno de inversión, ya sea mensual, bimensual, semestral o anual.

En contraste con esto, el empresario exitoso “le da estabilidad al negocio, retorna su inversión y empieza a pensar si el negocio debe crecer y volver a invertir o si diversifica su portafolio de inversiones, o sea recupera la plata de los activos que compró en su ganado para pensar en invertir en el crecimiento del mismo negocio o en otras actividades”, comenta Méndez. (Lea: 5 tips para tener una ganadería exitosa) 

Finalmente, el profesional concluye que es un asunto complicado porque cuando no se piensa en el retorno de inversión sobre el activo operativo de una ganadería, si no se pone en la mira, jamás se podrá lograr.