En el Caribe los pequeños ganaderos son los que más sufren las consecuencias de la sequía

La temperatura en gran parte del país podría subir 1.5 grados —advierte el Ideam—, que se presentaría en los próximos meses. Frente a esta situación ganaderos del Caribe se encuentran preocupados por la falta de preparación para afrontar el impacto del fenómeno de El Niño.

Ernesto Piedrahita, ganadero de Valledupar, dijo a CONtexto ganadero que la situación es alarmante: “de mis 50 reses yo no sé cuántas me vayan a sobrevivir, porque en años pasados esto ha sido muy duro, y este fenómeno siempre nos afecta mucho.”

El Caribe ha experimentado una sequía severa

Piedrahita explicó que ya se encuentran impactados pues en los últimos meses el Caribe ha experimentado una sequía severa que ha generado afectaciones a los pastizales y los cultivos destinados a la alimentación del ganado. La falta de alimento adecuado ha llevado a una disminución en la producción de leche y a un deterioro en la condición física de los animales.

Los pequeños ganaderos son los que más sufren las consecuencias, ya que suelen tener recursos limitados para hacer frente a los desafíos que impone el cambio climático.

La falta de acceso a sistemas de riego eficientes y la carencia de infraestructuras adecuadas para almacenar agua agravan la situación. Estos ganaderos dependen en gran medida de la producción de leche y carne para su sustento económico, por lo que cualquier reducción en la productividad se traduce en pérdidas significativas para ellos. “La falta de agua y el deterioro de los pastizales nos disminuye la producción de leche”, dice Piedrahita.

La sequía afecta la calidad y cantidad de alimento disponible para el ganado, lo que se traduce en una baja en la ganancia de peso de los animales, perjudicando directamente los ingresos de los ganaderos y la rentabilidad de sus negocios.

La necesidad de medidas de adaptación y mitigación

Aunque algunos ganaderos implementan practicas para prepararse frente a este fenómeno como, por ejemplo, tener un riego eficiente con prácticas de conservación del agua, diversificar las fuentes de alimentación para el ganado y mejorar las infraestructuras para el almacenamiento de agua. Estas medidas no logran ser suficientes.

Por eso, el gremio ganadero del Caribe le pide al gobierno apoyo financiero para implementar las medidas de adaptación necesarias. “Necesitamos que el Gobierno le preste atención al tema, (pues) esto no solo nos afecta a nosotros como ganaderos si no a todo el país, porque si no hay vacas, no hay alimentos” concluyó Piedrahita.
.