Gobernación y campesinos de Boyacá se unen para frenar explotación minera

La explotación de carbón afectaría a uno de los páramos más importantes del país:el de Pisba,municipio de Tasco, en Boyacá. Tras varias protestas, se efectuó una acción de tutela para frenar su exploración indiscriminada e ilegal.

Los campesinos del municipio de Tasco, ubicado en el departamento de Boyacá, están alterados y demuestran públicamente su oposición ante la destrucción de uno de los páramos más importantes de la región: el de Pisba.

Nelson Ramiro Vargas Alba, profesional en Gestión Productiva y Salud Animal de Fedegán, argumenta que “los páramos aseguran el 70% del agua de los colombianos, y ahora el Páramo de Pisba está rodeado por maquinaria de una multinacional que quiere sacar carbón. El frente de resistencia que hicieron los campesinos del municipio, puso en evidencia ante el país el gran conflicto social que se está 'cocinando' en Tasco, Socotá y, en general, en la provincia de Valderrama, como consecuencia de los intentos de mineros informales y de grandes firmas de explotar carbón en el páramo de Pisba”.

La explotación de carbón amenaza las fuentes hídricas, un riesgo que siempre existe cuando de extraer recursos naturales se trata. En el páramo de Pisba no solamente nace el agua para Socotá y Tasco, sino que también es fuente de varios ríos y quebradas que llegan hasta Casanare y que alimentan acueductos para muchas comunidades agricultoras y ganaderas. (Se registran protestas contra empresas petroleras en varias regiones del país).

“Por eso el conflicto que se desató con la firma Hunza Coal no es el primero ni será el último. En una reunión que sostuvimos con las autoridades de Tasco y con los ambientalistas, se llegó a la conclusión que el transito será solamente de vehículos particulares por la zona”, agregó Vargas Alba.

Por dicha situación, el gobernador de Boyacá, Juan Carlos Granados, instauró una acción de tutela ante el tribunal administrativo de Bogotá, mediante la cual intenta revocar la licencia ambiental que la Corporación Autónoma Regional de Boyacá, CorpoBoyacá, le concedió la multinacional mencionada anteriormente. (Presentan programa para proteger páramos y bosques en Boyacá). 

“En la expedición de la licencia se presentaron varias irregularidades como: no contar con la opinión de la comunidad de la zona, desconocer que el páramo es una parte del parque nacional y la agilidad con la que se dio el permiso: en apenas 25 días”, indicó Granados.

Por su parte, Mauricio Reyes, líder ambientalista de los campesinos que protestan en el municipio de Boyacá, manifestó que no se moverán del lugar, “hasta que la maquinaria de Hunza Coal no sea retirada de la zona”.