¿Cómo implementar un programa preventivo de veterinaria?

Conozca una metodología que puede implementar en su predio para desarrollar un programa preventivo de medicina veterinaria aplicado a sus animales. Estas claves pueden ser utilizadas para preservar la salud de semovientes sin gastar mucho en medicina curativa.

Las pautas fueron indicadas por los doctores Teodomiro Romero Andrade y Juan Ignacio Pérez sobre medicina preventiva y bioseguridad, precisando que la profilaxis y la higiene por sí solas no contribuirán en el hato sin un funcionamiento adecuado del sistema inmune de los animales.

Por ello propusieron algunas ideas para implementar un programa preventivo de medicina veterinaria en el hato, que comienza por determinar el número de animales y el tipo de sistema de producción en la finca (si usa fertilizantes, si tiene riego, si dispone de corral de engorde, etc.).

Con base en estos datos, se puede establecer el número de trabajadores y los costos de los productos Luego se fijará una serie de cursos y talleres de capacitación para estos empleados. (Reportaje: Monitoreo animal, clave para mejorar la rentabilidad del negocio)

Para mantener el ganado en buena salud de manera sencilla, se necesita:

1. Reconocer los riesgos de las enfermedades en las zonas conociendo su incidencia y prevalencia a través de las disposiciones de la autoridad sanitaria (en el caso de Colombia, el ICA), los laboratorios, asociaciones, centros de investigaciones, entre otras entidades.

2. Luego debe consultar las épocas en que ocurren estas patologías, de manera que se incremente la resistencia antes de que se presente el riesgo, para mitigar los factores de riesgo que puedan producir su aparición. (Lea: 666 mil animales han sido evaluados de manera preventiva)

3. Realizar un programa por ciclo biológico (módulos) para un mayor control. Esto se acompaña de hojas de cálculo o bases de datos para monitorear los costos. Finalmente, cuando se tenga claro qué hacer, se deben desarrollar guías para todas las personas relacionadas con la actividad pecuaria.

Programa de control integral

En zona tropical húmeda es prioritario un programa de control integral y requiere un enfoque ecológico y principios básicos que incluyan estudios de las especies de parásitos, temperatura y humedad ambiental, manejo nutricional, condición corporal, como los principales componentes.

También se debe hacer una delimitación epidemiológica, donde se haga un diagnóstico de los ciclos biológicos de los principales nemátodos identificados en el país donde se trabaje y que incluya fasciolas, garrapatas, moscas chupadoras, moscas del cuerno, ácaros, etc.

Se deben conocer o investigar los sistemas de producción, establecer control administrativo y prácticas de manejo, programas preventivos de higiene y profilaxis y tener un conocimiento del manejo de las vacunas y los antisépticos, conservando la cadena de fría desde que sale del laboratorio hasta que llega a la finca.

En la higiene conocer con profundidad:

1. La resistencia de los microbios.
2. Especificidad del producto.
3. Influencia del medio en que se realiza la desinfección.
4. Temperatura de uso de la solución desinfectante.
5. Cantidad de solución por unidad de área.
6. Tiempo de exposición.
7. Método de aplicación.
8. Influencia de la limpieza y desecación mecánica previa.

Hay que realizar igualmente un control de antihelmínticos basado en el mecanismo de acción, el tamaño de las partículas, la toxicidad, el rango de actividad y el efecto ovicida, así como los factores atribuidos al hospedero como el reflejo de la canaladura esofágica y el desarrollo de inmunidad.

Un aspecto importante es el manejo de la nutrición con el fin de prevenir enfermedades metabólicas así como los estudios epizootiológicos para el manejo de enfermedades como brucelosis, leptospirosis, anaplasmosis, entre otras. (Lea: ¿Qué debe contener un plan sanitario?)

Para llevar a cabo un calendario de vacunación, hay que tomar en cuenta los factores que dependen de las condiciones del medio ambiente, incidencia, prevalencia, vectores o transmisores de la enfermedad y tipo de explotación.

La inmunidad natural es un factor importante en la resistencia y prevención de enfermedades en los recién nacidos, en muchas explotaciones ganaderas, donde se da gran importancia a la inmunización de la madre antes del parto, con objeto de que el recién nacido reciba el complejo inmunológico (anticuerpos) promedio del calostro.