Fuertes lluvias preocupan a ganaderos de Arauquita

Debido a la emergencia invernal que afecta a los habitantes de la capital departamental más de 20 veredas con cultivos orgánicos y predios ganaderos están anegadas debido a las precipitaciones que no se detienen.

En el municipio de Arauquita, luego de las lluvias que duran días enteros, más de 20 veredas con cultivos se han visto afectadas tras el desbordamiento del río Caranal. Los reportes de la Alcaldía municipal indican que más de 100 hectáreas de cultivos de plátano, yuca, papaya, maíz, pasto y cacao se perdieron pese al esfuerzo de los habitantes de la zona.

“En los últimos días, por el desbordamiento del río Caranal, en el municipio de Arauquita se afectaron varias veredas, donde aproximadamente 300 familias se vieron involucradas”, explicó Víctor Nieves Peña, Jefe Operativo de la Defensa Civil del departamento de Arauca. (Lea ‘Grave emergencia vive Chocó por cuenta del invierno’)

Las veredas que hasta el momento están afectadas son Unión de Cardenales, Caño Azul, Buenos Aires, La Cristalina, Mata de Coco, Santa Isabel, Caranal, Caño Hondo, La Paz, Fundación, entre otras.

“Esta es una zona que ha sufrido desde hace más de 10 años un taponamiento en el río Caranal, al cual se le han invertido $100 millones y no han sido suficientes, entonces cuando esto pasa, como ahora, la Gobernación y la Alcaldía ayudan con el envío de una retroexcavadora y un planchón para tratar de bajar el nivel del río”, explicó Alfonso Grass, presidente del Comité de Ganaderos de Arauquita.

Grass también sostuvo que cerca de 48 mil bovinos se han visto afectados en la región, los cuales han tenido que ser traslados a otros predios e inclusive llegar a ocupar las carreteras, con el fin de que eviten el consumo de agua que ha anegado los predios de la región. (Lea ‘Ganaderos toman medidas ante la inminente llegada del invierno’)

El Concejo municipal y el área de Gestión del Riesgo, están en la tarea de enviar reportes continuamente al Gobierno y departamental para evidenciar la necesidad de intervenir los ríos Caranal, Tigres y Cusay, los cuales no tienen la suficiente capacidad para encausar la corriente de agua.