Por falta de agua, cultivo de avena de ganaderos de Carcasí se perdió

A pesar de los grandes esfuerzos que venía realizando la asociación ganadera ‘Genética del Futuro’ de Carcasí, en Santander, el cultivo de avena forrajera que venían cosechando en 2 hectáreas se perdió por cuenta de la escasez de agua.   La asociación, que está ubicada en la vereda Agua Tendida en el municipio santandereano, venía trabajando con sus 50 integrantes en el cultivo de este cereal con el objetivo de ensilarla y brindarle alimentos a los ganados en esta época crítica de verano.   Debido al deteriorado estado del cultivo, se llevó a cabo una reunión con todos los asociados y se tomó la decisión de no ensilar, pues basándose en la experiencia con la que ellos cuentan reconocieron que el cultivo no era apto y no valía la pena realizar ese proceso. (Lea: Los beneficios de mezclar avena y Vicia para su ganado)   De acuerdo con Diego Eduardo Ríos, líder regional del proyecto Asistegán en Santander y funcionario del Fondo Nacional Ganadero, FNG, la problemática que surge con la escasez de agua se ha venido presentando desde finales de 2015 y es una situación que ha afectado gravemente al sector ganadero del departamento.   “La asociación de ganaderos estaba trabajando en un cultivo de avena en 2 hectáreas, el cual estaba destinado a ser ensilado y repartido entre ellos mismos. Si bien ellos estaban atentos al tema del cambio climático, el verano pegó con tanta fuerza que secó los caños y las fuentes y no hubo agua para hacer el riego. Afortunadamente aún hay recursos para el consumo humano y de los animales”, reseñó el profesional del FNG.   Agregó que a raíz de la mala experiencia se obtuvo un gran aprendizaje y por ello se tomarán ciertas precauciones en futuras siembras. Sostuvo que la asociación ganadera ‘Genética del Futuro’ ubicada en Carcasí decidió realizar un nuevo cultivo a la espera de mejores tiempos y lluvias.   Darwin Jesús Ebratt, ingeniero agrónomo del proyecto de asistencia técnica integral al sector lechero de Santander del FNG, aseguró que el cultivo iba a beneficiar a todos los ganaderos y que es lamentable que debido a la situación y al desconocimiento de ciertos aspectos se haya perdido el esfuerzo realizado. (Lea: Sembrar semillas de pasturas para el ganado, todo un cuento)   El ingeniero agrónomo manifestó que la afectación fue bastante severa debido al fenómeno de El Niño y a eso se sumaron varios aspectos que jugaron en contra. Por un lado no había un registro de lluvias, ni estaciones meteorológicas, ni tampoco un pluviómetro y el cultivo se realizó en un lote saliente de papa, por lo que el suelo se encontraba muy drenado, no conservaba la humedad y las pocas lluvias que cayeron no eran suficientes; además, el predio se encontraba en una pendiente.   También dijo que la humedad relativa de la región, que está ubicada a 3.400 metros sobre el nivel del mar es bastante baja y que debido a eso la transpiración de la planta era mayor, lo que impedía que la misma retuviera un poco de agua. Añadió que el viento tampoco ayudó a la preservación del cultivo de avena.   Una de las conclusiones a las que llegaron los ganaderos de Carcasí fue que en el próximo proyecto que vayan a emprender de cultivo de avena deberán tener en cuenta diferentes aspectos: se sembrará material tolerante para la sequía como la avena Cayuse, los terrenos deben ser preparados antes de la temporada de lluvia, se contará con mayores reservas de agua para realizar el riego, entre otros. (Lea: Cultivar avena para ensilar, opción para predios lecheros especializados)