Conozca la forma correcta de derribar y sujetar el ganado

Frente a cualquier situación de emergencia, ya sea por enfermedad o por algún accidente, es necesario manejar los animales de manera segura tanto para ellos como para los operarios.

Un animal enfermo tiene una conducta y una sensibilidad distintas, por lo que es indispensable siempre que se deba manejar un animal contar con las medidas de cuidado necesarias antes de realizar cualquier procedimiento que pueda generar una reacción en él.

La correcta sujeción de un animal al momento de realizar la aplicación de un medicamento o prestar un auxilio durante una emergencia es un factor muy importante para evitar accidentes, por eso es indispensable  tener en cuenta que la seguridad del auxiliador y del animal son prioridad, según indicó Ricardo Arenas, médico veterinario especialista, en un nuevo capítulo del Manual Práctico Ganadero elaborado por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán),

Dependiendo de la docilidad, tamaño y edad del animal cuando la actividad que se va a desarrollar es sencilla, como una inyección, una desparasitación o la revisión rápida de una herida, se puede sujetar al animal por el cuello, los cuernos, la nariz con la utilización de una nariguera, por las patas, y si se cuenta con un brete es aconsejable su utilización.

Sin embargo, si se requiere que el animal esté en el suelo se pueden utilizar diferentes modalidades de derribe con lazo para lo cual es indispensable preparar el área de caída limpiándola de objetos que puedan causar lesiones. (Lea: Estas son algunas consideraciones para derribar un bovino)

El método de derribe utilizado depende del tamaño del animal, su edad y si es macho o hembra para cuidar sus genitales y la glándula mamaria.

Siempre que se derribe un animal se debe contar con suficientes lazos en buen estado, así como la ayuda de personal capacitado ya que no es una labor que pueda desarrollar una sola persona, esto evitará riesgos innecesarios y hará menos traumático el procedimiento para el animal.

Al momento de caer el animal se debe asegurar que sea lo más lenta posible evitando golpes; su cabeza debe caer suavemente y evitar que se golpee tratando de levantarse por lo que debe sujetarse suave pero firmemente con la mayor rapidez posible.

Los bovinos por ser rumiantes deben caer del lado derecho, por lo que las tensiones en las sogas deben realizarse promoviendo que así sea; si cae por el lado izquierdo se debe realizar el procedimiento rápidamente o corregir la postura del animal.

Los métodos utilizados para derribar y sujetar el ganado  

Método con pial. Se debe usar un lazo largo de al menos 12 metros y uno corto con el que se enlaza el animal a un botalón amarrándolo por la parte baja para que al momento de caer al suelo no se lastime. Después se dobla el lazo largo por partes iguales y se lanza por debajo del animal para meter las dos puntas de manera que quede enrollado y se corre el lazo hacia las patas traseras para halar fuertemente hacia atrás con lo que el animal caerá. (Lea: Uso de narigueras facilita el manejo del ganado)

Tres lazadas o H. Se debe apegar el animal a un botalón o a un árbol, dependiendo del sitio donde se necesita derribar, siempre tratando de amarrar lo más bajo posible la cabeza y con la distancia suficiente para que al caer esta no quede colgando. Con otro lazo largo se realiza el derribe enlazando por el cuello y alrededor de los cuernos y luego con lazadas en la cruz y pasando por detrás de las extremidades anteriores en la axila y otra lazada en el anca. Colocándose detrás del animal se tira del lazo constantemente y de manera firme y fuerte hasta que el animal pierde el equilibrio y cae.

Método de la X. Consiste en realizar con el lazo una X sobre el animal. Es un método de preferencia para usarse en vacas pues evita lastimar la ubre. Luego de apegar el animal a un botalón o árbol, con un lazo de 12 a 14 metros se dobla por la mitad y se coloca alrededor del cuello del animal pasando cada punta por el pecho y por dentro de las patas delanteras de manera diagonal, luego se sube cada punta para realizar  una X o cruz sobre el lomo y se pasan por entre las patas traseras. Después, colocándose detrás del animal se tira del lazo constantemente de manera firme y fuerte hasta que el animal pierde el equilibrio y cae, siempre buscando que lo haga del lado derecho.

El derribamiento de terneros que se hace para realizar procedimientos propios de su manejo como la curación del ombligo se realiza sin el uso de lazos por su tamaño y peso y así evitar lesiones en sus huesos en formación.

Para animales pequeños y dóciles se deben pasar las manos por encima del animal y con cada mano tomar la extremidad del lado opuesto y así halarlo alzándolo ligeramente y usando el cuerpo como apoyo tumbarlo.

Para animales un poco más grandes se puede tomar la base de la oreja con la mano izquierda pasando por encima del animal, luego con la mano derecha se toma el pliegue del ijar para levantarlo y dejarlo deslizar suavemente sobre la pierna del operario evitando golpearlo en la caída. (Lea: Conozca más sobre la identificación y sujeción de terneros)

Una vez derribado el animal, cualquiera que sea su tamaño y técnica a utilizar se debe realizar la sujeción para inmovilizarlo correctamente y así evitar que se levante nuevamente o que se presenten accidentes durante el proceso por reacciones violentas como patadas o movimientos bruscos.

En el caso de los terneros se pueden inmovilizar las extremidades delanteras uniéndolas al cuello del animal y las patas traseras maneadas y atadas a un poste fijo o se puede hacer la inmovilización de las cuatro patas juntas mediante manejo.