sales minerales para ganado, sal mineralizada casera, requerimientos nutricionales del ganado, exámenes bromatológicos del pasto, alimentación bovina, manejo animal, CONtexto ganadero
Foto: nutricionanimalct.blogspot.com

Cargando...

Conozca la receta para preparar sal mineralizada casera

Por - 22 de Septiembre 2016

Además de contar con una buena calidad de forrajes y fuentes hídricas, los ganaderos en Colombia deben tener en cuenta la importancia de las sales mineralizadas en la alimentación balanceada de sus semovientes.


Además de contar con una buena calidad de forrajes y fuentes hídricas, los ganaderos en Colombia deben tener en cuenta la importancia de las sales mineralizadas en la alimentación balanceada de sus semovientes.   Los minerales no representan una opción nutricional en el hato de carne o leche, son obligatorios. Y la cantidad que se debe dar, por medio de los alimentos, está relacionada con la zona, tipo de ganado y calidad de las pasturas.   Ángela Mosquera, zootecnista de la Fundación Universitaria Agraria de Colombia y especialista en nutrición animal, explicó que si bien la alimentación básica de los bovinos es el pasto, es muy importante que el ganadero incluya en la dieta la sal mineralizada. (Lea: Es posible tener hatos ganaderos eficientes en espacios reducidos)   Señaló que antes de empezar a dar este tipo de sal a los animales, el ganadero debe realizar unos exámenes bromatológicos del pasto para saber cuáles son las deficiencias minerales que tiene la finca, y con base en eso, buscar un producto que se adapte a esas necesidades.   La experta aseveró que cada finca es un mundo diferente y apuntó que el principal error que comenten muchos productores, a quienes no les gusta profundizar en estos detalles y pagar por una asesoría, es que compran cualquier sal mineralizada que ofrecen en el mercado.   "La elección de la sal, ya sea del mercado o producida por uno mismo, debe ser acorde a lo que el pasto le suministra al animal. Algunos ganaderos escogen el producto según el porcentaje de fósforo, lo cual es está mal porque este no es el único elemento que le puede estar faltando al ganado, hay otros como el zinc, calcio, magnesio, entre otros que también son necesarios", expuso.   Por otro lado, dijo que algunas sales mineralizadas del mercado pueden llegar a ser muy costosas y más cuando se popularizan, una de las razones por las cuales se aumentan los costos de producción.  (Lea: 3 consejos para hacer de la ganadería una actividad sostenible)   José Gregorio Pérez, pequeño productor y campesino oriundo del municipio de Ragonvalia en Norte de Santander y tecnólogo agropecuario, comentó que se dio cuenta que las sales que estaba utilizando tenían algunas falencias en cuanto a la nutrición mineral, entonces con el ánimo de buscar alternativas para suplementar los requerimientos de los animales que fueran viables económicamente decidió fabricar su propia sal casera.   Como buen ganadero, explicó que antes de entrar a producir la sal es necesario revisar y determinar el estado fisiológico y la edad de los animales y a la composición de los pastos.   Detalló que se puede trabajar con 2 tipos de sales, una para producción de ceba y otra para producción láctea, está última, la que él utiliza, tiene una mayor concentración de calcio. (Lea: Sea recursivo para alimentar a los semovientes en temporadas de verano)   La sal casera que produce este tecnólogo agropecuario es a base de fuentes naturales. El fósforo proviene de rocas fosfóricas y el calcio de la cáscara de huevo.   Partiendo del hecho de que la cáscara de huevo tiene un 94.9 % de calcio y otros elementos se decidió utilizar esta materia prima.   Para conseguir el calcio, primero se recolectan las cáscaras, se lavan y desinfectan con hipoclorito al 1 %, luego se le adiciona ácido acético o vinagre al 10 % y posteriormente se dejan sumergidas en estas sustancias por 12 horas.   En el siguiente paso, las cáscaras se hierven por 2 horas con el mismo líquido en el que estaban remojadas, luego se retiran los residuos de agua, se ponen al sol hasta que estén totalmente secas y finalmente se pasan por un molino, hasta obtener partículas muy finas.   "Con este proceso se obtiene un calcio de muy buena calidad y muy asimilable por los bovinos", afirmó.   Señaló que una vez se tiene claro cuáles son las concentraciones de fósforo y calcio, se balancean las proporciones de acuerdo a las necesidades nutricionales que necesitan diariamente los bovinos, se procede a combinar los 2 elementos y se les agrega: sal yodada, sal de sodio y algunos sulfatos (magnesio, zinc, cobre y azufre).   Por último, se mezclan todas las fuentes hasta crear un producto homogéneo y se le adiciona melaza líquida para aumentar la palatabilidad.  (Lea: La importancia de la sal mineralizada en la dieta del ganado)   Desde que se empezó a utilizar esta sal casera en la finca, el ganadero aseguró que los índices productivos mejoraron considerablemente, la producción de leche por vaca pasó de 5 litros al día a 7 u 8, se redujeron los días abiertos, pasando de 150 días a 90, y la resistencia a parásitos también aumentó.

Las más vistas