es-mejor-vaca-da-cria
Foto: gr-global.com.arSegún Aristizábal, es mejor una vaca que dé una cría al año que la que dé más leche pero menos crías, porque al depreciar el costo del animal, lo compensa durante su vida productiva.

Cargando...

«Es mejor una vaca que da una cría al año que la que da más leche»: Aristizábal

Por CONtexto ganadero - 21 de Junio 2023

Según Aristizábal, es mejor una vaca que dé una cría al año que la que dé más leche pero menos crías, porque al depreciar el costo del animal, lo compensa durante su vida productiva.

El ingeniero agrónomo zamorano Álvaro Aristizábal aseguró que es mejor una vaca que dé una cría al año que la que dé más leche pero menos crías. El experto argumenta que al depreciar el costo del animal, la primera lo compensa durante su vida productiva al ofrecer más terneros, algo que no hará la segunda aun cuando sea más productora de leche.


De acuerdo con el experto, el ideal no solo es que cada año la vaca tenga un parto, sino que además el intervalo entre partos debe ser en promedio de 15 meses, pues con este tiempo darán las cinco o seis crías que se espera de ellas durante su vida productiva y «se puedan depreciar ellas mismas».

«Esto no lo considera mucha gente pero el costo de una vaca lo tienen que depreciar con seis crías. Si la vaca no da sino tres crías porque pare cada dos años y medio, entonces la vaca no logró pagarse ella misma, lo que hace que se reduzca el patrimonio del propietario», precisó Aristizábal.

En consecuencia, el ganadero debe conseguir vacas que no sean altas productoras de leche, pero que sí se preñen y paran cada 12 a 14 meses (aclaró que el ideal sería de 12 meses) y hayan dado entre cinco y siete crías a lo largo de 10 años de vida en promedio. (Lea: La cría, un negocio rentable y con resultados a corto plazo)

«La reproducción es mucho más importante que producción de leche y producción de carne. La gente siempre se inclina por las vacas que dan más leche pero cuando dan más leche, se demoran más entre un parto y otro, afectando el factor más importante que es la reproducción», añadió.

De igual manera, Aristizábal privilegia vacunos de menor tamaño, porque si son animales grandes, se demoran más en llegar a su pubertad y a su condición corporal para preñarse. Como lo ha señalado en varias ocasiones, se trata de elegir un biotipo adaptado al medio ambiente, para que pueda consumir los forrajes adaptados a la zona que son más fáciles de mantener. En cambio, cuando se utilizan plantas que no son endémicas, se requieren muchos insumos para mantenerlas, lo que eleva los costos.

Continuando con su explicación sobre la reproducción por encima de la producción, indicó que 100 vacas altamente fértiles son mucho más rentables que 100 vacas con alta producción pero baja fertilidad. (Lea: Qué dicen los expertos acerca de cómo tener una cría por vaca al año)

«Muchos no consideran los costos de manejo de un animal, que están entre 40 a 50 mil pesos mensuales pero que no salen todos del bolsillo. Entre esos están los intereses de capital invertido, la mano de obra y la vigilancia, el costo de oportunidad, los insumos, eso es entre $40 y 50 mil», dijo.

El ingeniero agrónomo lo explicó con otro ejemplo: un ganadero que tiene una vaca que pare cada 12 meses gasta menos en ella que la otra que tarde 15 meses, pues son 3 meses más de costos.

También advirtió que aunque se reciban altos ingresos por la venta del ganado en producción de carne, al hacer el balance al final del año es posible ver que no hubo la rentabilidad esperada, porque los costos de producción fueron elevados.

«Nos acostumbraron con la famosa revolución verde que siempre debe haber máximos producciones para obtener máximas ganancias de peso, pero no nos hablan nunca de máxima reproducción, ¿cierto? Y esto tan importante en cualquier negocio ganadero», anotó.