La raza Velásquez tiene gran longevidad, adaptabilidad y buena producción.
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Velásquez, una raza de tradición en Colombia con gran adaptabilidad

Por - 26 de Marzo 2022


La raza Velásquez tiene más de 60 años de historia en Colombia y sigue siendo la preferida por algunos ganaderos del país gracias a sus características como longevidad, resistencia y buena producción.

José Antonio Velásquez, es quien está al frente del negocio en estos momentos y cuenta que la raza fue formada por su padre el veterinario José Velásquez que comenzó sus trabajos en 1957 y después de haber estado en la decanatura de la Universidad Nacional en Bogotá durante más de once años se dio a la tarea de formar una raza.

Esta se hizo en la Hacienda África, ubicada en el municipio de Victoria (Caldas), muy cerca de La Dorada, al margen izquierdo del río Magdalena con una altura de 200 metros sobre el nivel del mar, una temperatura promedio en el año de 29 grados centígrados y una humedad relativa por encima del 80 %.

El uso de la tierra es de ganadería y conservación, se busca hacer la ganadería lo más amigable posible con el medio ambiente.

Lo que el padre quería al formar esta raza era que fuera adaptada a las condiciones de esta zona del país, que fueran animales con una alta resistencia a enfermedades infecciosas y parasitarias propias de los climas cálidos de Colombia. (Lea: Velásquez, raza pionera de la reconversión ganadera en Colombia)

Así mismo buscaba que fuera una raza fértil y precoz además que tuviera una excelente carne, además de topa, longeva y roja.

Para ello escogió tres razas como fueron el romosinuano, el brahman rojo y el red poll (desarrollada en Inglaterra a principios del siglo XIX) buscando que se complementaran y obtener lo mejor de cada una de ellas.

Por el lado del romosinuano se buscaba mansedumbre, raza topa, color rojo, altamente fértil, rústica, pelo corto brillante y consumidora de forrajes toscos. Son animales de excelente condición corporal que nunca buscan la sombra sino que siempre están en el potrero consumiendo forraje.

En cuanto al brahman rojo, lo escogió porque es un animal muy rústico, con un sistema digestivo fuerte, es una raza longeva, muy bien pigmentada, de origen hindú, también con el pelo corto y brillante, que suda abundantemente, es decir, tiene una buena cantidad de glándulas sudoríparas al igual que glándulas sebáceas lo que le permite defenderse muy bien de los ectoparásitos y los endoparásitos.

La otra raza utilizada fue el red poll y se hizo porque es de Europa, es una taurina pero que se formó en condiciones muy diferentes a las de ese continente, siempre fue consumidor de forrajes, nunca lo alimentaron con granos. Era una raza productora de carne y leche.

Por condiciones de la misma isla donde se formó, Inglaterra, tiene un clima muy diferente al del continente europeo, allí las temperaturas no son tan difíciles, los ganados permanecen en los potreros, no son estabulados. Se trata de una raza doble propósito, roja, topa, muy fértil y reunía las características que el padre buscaba para conformar la Velásquez. (Lea: Las bondades de la raza Velásquez)

El Velásquez es el producto de la inmigración del romosinuano, el brahman rojo y el red poll, resulta de cruzar un grupo de novillas romosiuano con un torete brahman rojo. Esas hembras del primer cruzamiento se cubrieron con un toro red poll teniendo machos y hembras que teóricamente son 25 % romosinuano, 25 % brahman rojo y 50 % red poll.

Todos los machos del primer cruzamiento se eliminaron y se dejaron únicamente las hembras que fueron las que se cruzaron con el red poll y los mejores machos y hembras de este segundo cruce se cruzaron entre sí.

El resultado fue un ejemplar de mediano tamaño, topo, rojo, de orejas medianas colocadas horizontalmente, con muy buena cantidad de piel, gran cantidad de glándulas sebáceas y sudoríparas, con un dimorfismo sexual marcado, las hembras son muy femeninas con una gran capacidad torácica como abdominal, buena musculatura. De lejos se determina cuál es el macho y cuál la hembra. Los animales de esta raza tienen muy buena musculatura y aplomos, con unas pezuñas muy aguantadoras, difícilmente se ve con una cojera.

La Velásquez es una raza de mediano tamaño, los toros pesan entre 650 y 680 kilos en promedio y las hembras entre 400 y 430 kilos, muy adaptados a nuestras condiciones de alta temperatura y humedad, son bovinos adaptados a consumir arvenses.

El 70 % de las zonas planas de la finca son en pasto vaciega considerado una maleza aunque ya se está viendo como un forraje más dentro del entorno ganadero en Colombia.

El trabajo eficiente en la Hacienda

En la hacienda se hace el destete en corral y al mes pueden tener una ganancia de peso de alrededor de 500 gramos diarios. (Lea: Razas colombianas, las más resistentes a los cambios climáticos)

Allí no se utilizan herbicidas ni maquinaria pesada y tampoco se hacen quemas, no se usan anabólicos, haciendo una ganadería natural.

La raza es genéticamente topa, con un color que va del amarillo al rojo cereza con el pelo corto, brillante y liso. Las vacas enseñan a sus terneros desde muy temprana edad a consumir forrajes toscos.

Los machos Velásquez son musculados en su tren posterior, presentan una musculatura más desarrollada y son animales muy mansos que es una gran ventaja al tener manejo dentro de un potrero.

Características de la raza

Es una raza muy longeva, hay vacas de 21 años con 16 crías y sirve para mejorar la eficiencia económica de la finca.

Tienen un intervalo entre partos que oscila entre 375 y 4721 días, sin embargo en un trabajo que se hizo de 5.155 observaciones el promedio fue de 396 días, con una calidad de carne excelente y el peso con que llegan los novillos al frigorífico.

Se ha cambiado el sistema de pastoreo en los últimos años y ahora es un poco más intensivo manejando el menor número de días los ejemplares en los potreros y procurando dejar estos el mayor número de días posibles en descanso. (Lea: Trabajos y adelantos de la raza Velásquez)

Se cuenta con un toro que es el África Velásquez Masai 479T-4 escogido por un experto como el mejor por su masculinidad, comportamiento entre la manada, musculatura y las características reproductivas de la madre, era el ideal para utilizar tanto en esta raza como en vacadas de otras razas.

El Velásquez aporta fertilidad, adaptabilidad, longevidad y mansedumbre a cualquier raza foránea para que esta sea capaz de ser productiva en ambientes adversos de temperatura, humedad y parasitismos externos. Es una alternativa genética para realizar cruzamientos terminales en sistemas de producción de leche en ambientes tropicales.

Igualmente es una excelente alternativa para generar sistemas de producción de carne utilizándola como complementariedad de razas foráneas productoras de carne en ambientes de trópico.    

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